Pese a que los acuerdos han caído a cuentagotas en la conferencia sobre el cambio climático de la ONU (COP27), ayer se alcanzó un pacto sin precedentes.
Después de 24 horas de intensa negociación, las casi 200 delegaciones acordaron crear un fondo de financiación destinado específicamente a que países en vías de desarrollo enfrenten los daños sufridos por los desastres climáticos.
Los países del sur más impactados por la crisis llevaban reclamando ese fondo desde hace 30 años, pues históricamente aportan poco al calentamiento global, pero padecen más los efectos de inundaciones, sequías, ciclones y otros fenómenos.
Al cierre de esta edición no se había dado a conocer el acuerdo final de la cumbre, prevista para terminar el viernes. Uno de los grandes obstáculos era cómo mencionar el futuro de las energías de origen fósil, emisoras de CO2 y metano, dos gases causantes del efecto invernadero.
Numerosos países exigieron establecer el abandono progresivo del uso de energías fósiles, un extremo al que se oponen naciones productoras de petróleo, como Arabia Saudita.
Compromisos
- Abandono progresivo del uso de las fuentes de energías fósiles.
- Eliminar tres mil millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) por año.
- Acelerar las aprobaciones para el despliegue masivo de energías renovables.
- Impulsar acciones colectivas sobre clima, biodiversidad y desertificación.
- Priorizar el agua, comenzando con las comunidades vulnerables en África.
Pactan fondo para países vulnerables
La cumbre acordó que el financiamiento a naciones afectadas por el calentamiento global, pero en menor medida contaminantes, recaerá en los países ricos.
SHARM EL-SHEIKH, Egipto.— La conferencia del clima de Egipto (COP27) entró en sus horas decisivas ayer tras un acuerdo sobre uno de los puntos más importantes, un fondo de pérdidas y daños causados por el cambio climático.
Después de 24 horas de intensa negociación, las casi 200 delegaciones acordaron un fondo específico con el cual asistir a los países en desarrollo frente a las pérdidas y los daños sufridos por los desastres climáticos.
Al cierre de esta edición no se había dado a conocer el acuerdo final de la cumbre, pero se hizo pública la gran división en torno a cómo mencionar el futuro de las energías de origen fósil, emisoras de CO2 y metano, dos gases causantes del efecto invernadero.
Numerosos países exigieron establecer el abandono progresivo del uso de energías fósiles, un extremo al que se oponen naciones productoras de petróleo como Arabia Saudita, según las fuentes consultadas.
La presidencia egipcia distribuyó un nuevo borrador entre las partes negociadoras, una vez vencido el plazo oficial de la conferencia el viernes.
El nuevo texto egipcio llegó después de un ultimátum europeo, que denunció lo que consideraba un “retroceso inaceptable”.
Según los europeos, la presidencia egipcia quería hacer retroceder el compromiso sobre las emisiones de gases de efecto invernadero.
La UE prefiere “no tener un acuerdo que un mal resultado”, declaró el vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans.
La mitigación es imprescindible para mantener en pie el objetivo de limitar el calentamiento del planeta en +1.5 ºC, planteado en el Acuerdo de París de 2015.
Los países del sur más impactados por los desastres naturales llevaban reclamando ese fondo específico desde hace 30 años.
El fondo busca ofrecer financiación “predecible y adecuada” a esos países, que históricamente aportan poco al calentamiento global y sufren más los efectos de inundaciones, sequías y ciclones.
Algunos de los acuerdos:
- Reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Algunos países fijaron sus propias metas, como México.
- Eliminar tres mil millones de toneladas de CO2 por año, con otros 500 millones de toneladas por año almacenados durante al menos 100 años. Objetivo propuesto por Estados Unidos.
- El abandono progresivo del uso de energías fósiles.
- Reforzar la resiliencia climática global, incluida la duplicación de la promesa de EU para el Fondo de Adaptación a 100 millones de dólares.
- Acelerar la acción climática global, incluido el lanzamiento de una nueva iniciativa para apoyar a Egipto en el despliegue de 10 GW de nueva energía eólica y solar.
- Poner el agua al frente, comenzando con las comunidades y ecosistemas más vulnerables del mundo en África.
- Impulsar la acción colectiva en torno al clima, la biodiversidad y la desertificación.
- Proporcionar un marco holístico para lograr sistemas urbanos sostenibles.
- Acelerar la planificación y las aprobaciones para el despliegue masivo de energías renovables e hidrógeno verde.
Fuente: Excelsior.