Cuba. La Conferencia de Obispos de la Iglesia Evangélica Luterana en Estados Unidos abogó a favor de la eliminación del bloqueo económico, financiero y comercial que por más de 60 años mantiene su gobierno contra Cuba.
En una misiva enviada al presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Bob Menendez, la organización atribuyó todas las privaciones sufridas hoy por la ciudadanía de la mayor de las Antillas al cerco unilateral y al resto de las medidas que lo entronizan.
El efecto acumulativo de las acciones de nuestro gobierno resulta en el sufrimiento colectivo de todos los cubanos: esto no es moral ni está justificado, se lee en la carta divulgada en el sitio web de la entidad.
Detalló entonces una serie de restricciones que buscan asfixiar a la economía de Cuba como su inclusión en la lista de países patrocinadores del terrorismo, las trabas al acceso de los recursos energéticos, y las más de 240 medidas tomadas durante la administración del exmandatario Donald Trump (2017-2021) contra la isla.
Denunció además el carácter extraterritorial del bloqueo.
En este momento, el Sínodo Florida-Bahamas de la organización trabaja con socios de la iglesia noruega para enviar a La Habana un contenedor de suministros médicos, pero el banco de Nueva York, que actúa como agente, tiene los fondos congelados y exige una licencia de la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos.
Han pasado tres meses desde que los socios solicitaron esa licencia. ¿Por qué motivos se retienen estos fondos, y la licencia no es concedida?, cuestiona la misiva.
Las únicas restricciones a nuestro trabajo provienen de nuestro propio gobierno, sentenció.
Añadió que Cuba no es un estado patrocinador del terrorismo sino que contribuye a asegurar la paz, en referencia a su papel como garante en las conversaciones entre el gobierno de Colombia y los grupos guerrilleros del país.
La isla también respalda todos los acuerdos internacionales para combatir el terrorismo, coopera con el ejército de Estados Unidos en la interceptación de drogas, y también en otros ámbitos, reseñó la carta.
El documento pidió a Menendez revertir las actuales políticas punitivas económicas e internacionales contra Cuba e iniciar un camino hacia la normalización de las relaciones diplomáticas.
“Estamos listos para trabajar con su oficina en la creación de un futuro más allá de la hostilidad entre nuestras naciones”, remarcó el texto.
Fuente: PL.