Para la ONG internacional World Vision es prioritario garantizar la aplicación de los esquemas completos de vacunación contra el COVID-19 en todos los grupos de alto riesgo. Siguiendo los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se hace un llamado enfático a priorizar la aplicación y el cumplimiento de los esquemas completos de vacunación contra la COVID-19 en millones de niñas y niños. Así mismo, World Vision se une en apoyo a la OMS para incentivar el continuo desarrollo y testeo de más vacunas, especialmente enfocadas en la niñez, para reducir los riesgos de contagio de la enfermedad.
Un llamado que resalta la importancia vital de que las niñas y niños reciban no sólo los esquemas de vacunación completos contra el COVID-19 sino que se cumplan todas las recomendaciones de inmunización, priorizando esta población e invitando a cada país a considerar priorizar otros grupos o individuos que se pueden ver beneficiados en el marco de los propios contextos nacionales.
Resulta urgente que todos los fabricantes de vacunas aceleren y ahonden sus esfuerzos para incluir a las niñas y niños menores de 12 años de edad dentro de los testeos de seguridad y efectividad de las vacunas contra la COVID-19 y suministren dichos datos de contención de la enfermedad de forma prioritaria para expandir el número de esquemas de inmunización en la niñez de todas las edades.
Es preocupante evidenciar que en la niñez menor de 12 años de edad se presenta incrementos en los índices de infección por coronavirus, especialmente frente a la aparición de nuevas variantes que implican significativas afectaciones en su salud, incluso al punto de poner en riesgo sus vidas. Además de representar un alto riesgo de propagación del contagio, especialmente en las poblaciones más vulnerables, como los adultos mayores y las personas inmuno suprimidas, en países donde la niñez representa entre el 20% al 40% del total de la población, lo que significaría dificultades para alcanzar la inmunidad generalizada si no se cuenta con las niñas y niños debidamente vacunados.
Como organización humanitaria internacional, para World Vision su principal preocupación son aquellas personas y comunidades más vulnerables, siendo aquellos cuyas vidas se ven más amenazadas por el virus y cuyos medios de subsistencia han sido diezmados por la pandemia.
El COVID-19 ha infectado a más de 262,1 millones de personas en el mundo, causando más de 5,2 millones de muertes y dejando en promedio a más de 500.000 personas contagiadas diariamente. Un escenario cuyas afectaciones y consecuencias socioeconómicas amenazan con revertir décadas de avances hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la lucha contra la pobreza y las desigualdades, dejando a la niñez en alto riesgo, especialmente en aquellas familias que viven en contextos humanitarios en crisis.
Por lo mismo World Vision, siendo consciente de que algunas personas rechazan las vacunas para ellos o sus hijas e hijos y que tienen inquietudes acerca de esta vacuna en particular, hace un llamado a tener presente que la vacuna contra el COVID-19 promete no solo proteger a las personas, sino también a quienes no pueden ser vacunados. Las vacunas o los refuerzos previenen la transmisión, entonces cada persona que recibe las dosis necesarias contribuye a establecer una inmunidad más amplia dentro de sus comunidades y, en última instancia, a eliminar el virus.
El rol principal para la ONG dentro de la campaña mundial de vacunación es ayudar a «llevar los brazos a las vacunas», movilizando y ayudando a las comunidades a acceder a ellas, a través del asocio con los Ministerios de Salud para preparar e implementar campañas de vacunación; y, a través de acciones de promoción y rendición de cuentas, garantizando que los gobiernos nacionales y las agencias globales cumplan sus promesas.
Fuente. Periódico Digital Centroamericano y del Caribe
