Más de 668 mil personas beneficiadas en la región con una inversión sostenida y alianzas que reflejan cómo juntos alimentamos el futuro.
Guatemala. En Cargill, hablar de sostenibilidad es hablar de impactar positivamente a las personas. Es ayudar a los agricultores que trabajan la tierra con esperanza, en las niñas y niños que reciben un plato de comida nutritiva en su escuela, en las mujeres emprendedoras que hacen crecer sus negocios y en los colaboradores que, con pasión, dedican su tiempo a mejorar su entorno y ayudar a las comunidades. Esa es la esencia de Convivencia 2024, el informe más reciente de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) de Cargill en Centroamérica, que refleja el impacto positivo de sus acciones en Guatemala, Costa Rica, Honduras y Nicaragua.
Durante el último año, más de 668 mil personas fueron beneficiadas por los programas sociales de la compañía. Este alcance es producto del trabajo conjunto con aliados estratégicos y el involucramiento activo de sus empleados: cerca del 80 % de los colaboradores en la región participaron en actividades de voluntariado. Desde escuelas y comunidades rurales hasta centros de producción agrícola, Cargill ha estado presente en distintos espacios de la región.
Convivencia 2024 no solo muestra resultados, sino relaciones. Más de 4.7 millones de dólares fueron invertidos en proyectos sociales que hoy se traducen en acceso a alimentos, oportunidades económicas, bienestar animal y herramientas para adaptarse a los desafíos del entorno. Todo esto responde al propósito de Cargill: nutrir al mundo de manera segura, responsable y sostenible, priorizando siempre a las personas y las comunidades en las que opera.
Los programas permanentes son el corazón de esa estrategia. Nutriendo el Futuro, en alianza con CARE, ha fortalecido la seguridad alimentaria de familias mediante capacitaciones, huertos escolares y entrega de capital semilla. A través del programa Resiliencia de Medios de Vida, se ha logrado conectar a pequeños productores con los comedores escolares, creando ingresos sostenibles y acceso a productos frescos para miles de estudiantes. Con Comunidades Sostenibles, en conjunto con Glasswing, se han promovido iniciativas educativas, huertos comunitarios y formación en nutrición. Y con Dejando Huella, el enfoque ha ido más allá de las personas, generando conciencia sobre el bienestar de más de un millón de mascotas y animales atendidos.
“La sostenibilidad no es solo un objetivo, es una forma de actuar que refleja nuestro propósito y compromiso con las generaciones presentes y futuras. Entendemos que cada comunidad con la que trabajamos es parte esencial de ese camino. Por eso, llevamos más de cincuenta años en la región construyendo relaciones duraderas, impulsando iniciativas que generan bienestar, acceso a oportunidades y seguridad alimentaria. Lo hacemos desde la convicción de que el desarrollo sostenible no se logra en solitario, sino en alianza, escuchando y creciendo junto a quienes confían en nosotros”, afirmó Xavier Vargas, presidente de Cargill Food Latinoamérica.
Los éxitos alcanzados en Guatemala
En Guatemala se ha materializado a través del proyecto Agricultores que nutren a estudiantes, el cual ha beneficiado a más de 12 mil escolares. Heydi Ajú es una de los miles de productores apoyados por la alianza de Cargill con el Programa Mundial de Alimentos para mejorar la producción y acceso a mercados de pequeños agricultores. Ella, junto a su esposo Álvaro, trabajan en sus parcelas ubicadas en el centro de Guatemala en donde cultivan una variedad de vegetales frescos que son destinados a cientos de platos para alimentación escolar en el departamento de Chimaltenango.
Sumado a este compromiso con la nutrición, Cargill apoya a más de cien microempresarios por medio de los proyectos Microfranquicias Sociales y Shukeros Kimby: tradición que sabe a éxito, a quienes se les ha brindado capacitación y acceso a capital de trabajo para generar ingresos y convertirse en un pilar para la seguridad económica de sus familias.
“Detrás de cada programa hay personas, historias y decisiones que reflejan un compromiso auténtico con las comunidades. Hacer lo correcto implica crear oportunidades reales, generar bienestar y crecer de forma conjunta. Convivencia es la expresión de ese esfuerzo compartido y nos inspira a seguir construyendo valor donde estamos presentes”, expresó Vargas.
Las cifras refuerzan ese compromiso sostenido con el país. En el último periodo, se sirvieron más de 41 mil platos de comida, se atendieron a más de 600 productores, se cuenta con más de 390 mipymes fortalecidas y se donaron más de 36 toneladas de productos. Estos resultados evidencian el impacto tangible de una colaboración constante, orientada a generar desarrollo local mediante soluciones concretas y sostenibles.
Convivencia 2024 es más que un informe. Representa el compromiso continuo de Cargill con el crecimiento, la inversión social y la prosperidad compartida. Una forma de honrar el trabajo conjunto que permite alimentar el presente y construir un futuro más resiliente y sostenible.
Para conocer más sobre las historias y resultados del informe, puede acceder al siguiente enlace: https://convivencia2024-cargill.com
Fuente. Cargill