Una nueva investigación de Kaspersky en la que se entrevistó a proveedores de servicios médicos de 36 países, incluyendo países de Latinoamérica, reveló que el 63% de las organizaciones médicas de la región ya ha implementado servicios de telesalud. Sin embargo, el 36% de los encuestados ha experimentado casos en los que los pacientes rechazaron estas nuevas opciones de atención médica por motivos de seguridad.
La pandemia modificó radicalmente la percepción de las personas sobre el sector salud. Las organizaciones médicas se han adaptado a las nuevas condiciones y, hoy, el 56% de las instituciones de atención médica a nivel global tiene previsto aumentar su inversión en soluciones de telesalud y atención virtual. Kaspersky encuestó a los responsables de la toma de decisiones en el sector para saber cómo va la transformación digital de la industria y qué problemas creen que deben resolverse para crear un mundo en el que todos tengan acceso a una atención asequible, rápida y de calidad.
Según nuestro estudio, el 77% de los encuestados en la región cree que los servicios de telesalud serán los que más valor aportarán al sector de la atención médica en los próximos cinco años. Los profesionales señalan que la medicina a distancia es práctica y atractiva en muchos sentidos, con ventajas como el alcance inmediato, la menor transmisión de enfermedades entre los pacientes y el personal, así como la posibilidad de ayudar a más personas en menos tiempo.
Este planteamiento positivo tiene eco en la práctica médica real. Casi un tercio (32%) de las organizaciones sanitarias latinoamericanas coincide en que la mayoría de sus pacientes están más interesados en las sesiones a distancia que en las presenciales debido a la conveniencia de estas. Otras características de la telemedicina que resultan atractivas para los clientes son que las tecnologías modernas ahorran tiempo, esfuerzo y dinero, y ofrecen la oportunidad de consultar con un especialista más experimentado.
Estos beneficios han llevado a que los servicios de telesalud tengan más demanda. En Latinoamérica, el servicio más común proporcionado por las organizaciones es la telemedicina (63%), es decir, la comunicación en tiempo real con los pacientes, incluida la video llamada o el chat. Le siguen el monitoreo remoto del paciente a través de dispositivos portátiles (38%), y la tecnología de telesalud asíncrona (47%), método que recopila y almacena los datos de los pacientes en una plataforma segura basada en la nube para su posterior uso por parte del profesional que los trata.
Sin embargo, el 71% de los encuestados a nivel regional ha experimentado casos en los que los pacientes han rechazado una video llamada con el personal médico, y el 36% ha informado de que las personas han rechazado los servicios de telesalud por cuestiones de privacidad de datos. Otras razones citadas para rechazar esos servicios fueron la falta de confianza general hacia la telesalud (31%), la falta de voluntad para aparecer en vídeo (29%) y la falta de un equipo adecuado (37%).
No sólo los pacientes están preocupados por su privacidad: el 54% de los proveedores de servicios médicos en Latinoamérica afirma que los doctores de su organización han expresado su preocupación por la protección de los datos de los pacientes cuando realizan sesiones remotas, y sólo el 34% de los encuestados está muy seguro de que su organización cuenta con las medidas de seguridad necesarias.
«Con el rápido desarrollo y la complejidad que hacen que la industria de la salud sea más lucrativa para los actores maliciosos, ahora es el momento para que las instituciones de salud hagan de la ciberseguridad su prioridad. Es imperativo que evalúen su nivel de defensa actual y adopten sabiamente las soluciones y herramientas adecuadas. De esta manera, construirán un futuro en el que la distancia o los riesgos de ciberseguridad no serán una barrera y todos podrán recibir ayuda médica de alta calidad», comenta Claudio Martinelli, Director General para América Latina en Kaspersky.
El ejecutivo también subraya que el sector sanitario es altamente regulado, por lo que, en caso de algún incidente de ciberseguridad, la entidad puede enfrentar penalidades severas o bien, “en el escenario de sufrir una fuga de datos en la que se filtren datos privados de los pacientes, las consecuencias pueden ser devastadoras”, indicó.
La investigación confirma que la seguridad de la telesalud es una preocupación tanto para los proveedores como para los consumidores. Por ello, los expertos de Kaspersky comparten las siguientes recomendaciones para ayudar a las instituciones médicas a establecer un alto nivel de preparación en ciberseguridad:
●Proporcionarle los empleados que tienen acceso a la información personal de los pacientes capacitación en concientización de seguridad. La formación debe abarcar al menos las prácticas más esenciales, como el uso correcto de las contraseñas, la seguridad del correo electrónico, la mensajería privada y la navegación segura por Internet.
●La creciente popularidad de los servicios de telesalud requiere uso extensivo de los dispositivos informáticos y de las tecnologías de la información en general. Las soluciones de seguridad garantizan el control de las complejas infraestructuras informáticas y aseguran la protección de todos los dispositivos corporativos que tienen acceso a la red de la empresa.
●No pasar por alto la protección de los equipos médicos basados en sistemas integrados. Estos sistemas suelen tener poca capacidad operativa y sólo pueden realizar una tarea muy específica. Las soluciones de seguridad para sistemas integrados deben hacer frente a las últimas amenazas y ser compatibles con el hardware de gama baja.
●Utilizar un firewall que sirva de barrera contra las amenazas externas. Esto defenderá los servidores web de diferentes tipos de malware, incluyendo virus, ransomware y troyanos.
Fuente. Periódico Digital Centroamericano y del Caribe