Luego de haber sido dejados inicialmente fuera del proceso legal, y después de meses de solicitarlo, la Corte de Constitucionalidad permitió que MUSICARTES, la entidad de gestión colectiva que representa a los artistas musicales asociados en Guatemala, pudiera ser tercero interesado en la acción de inconstitucionalidad No. 2260-2022 planteada por la Cámara de Radiodifusión quienes pretenden que se eliminen los artículos 123 y 125 de la Ley de Derechos de Autor y Derechos Conexos.
Por esta razón, este miércoles 18 de enero, MUSICARTES presentó en la Corte de Constitucionalidad el escrito, evacuando la vista dentro del proceso de inconstitucionalidad con todos los argumentos legales para que esta acción sea declarada sin lugar. Además, se hicieron presentes artistas en apoyo a la solicitud presentada, y que llevaron una “Serenata por la Música”, a través de presentaciones musicales, dentro de las que se tuvo al grupo Legión, Mr. Fer, Voelín, Thyan, Francisco Páez de Malacates Trébol Shop, entre otros.
El escrito presentado, defiende el derecho que tienen los artistas de fijarle un precio a su trabajo ya sea directamente o por medio de las entidades de gestión colectiva a las que pertenecen y la obligación que tiene el Estado de Guatemala de velar por el cumplimiento de los tratados y convenios internacionales que ha ratificado, cuestiones que se regulan en los artículos que desean eliminar y que de declararse con lugar, traería un grave e irreparable daño y perjuicio a los artistas pero además un claro incumplimiento a los compromisos adquiridos por internacionalmente como país, dejando a Guatemala en una vergüenza internacional. Finalmente se aclara a los Magistrados cómo la solicitud de inconstitucionalidad planteada contiene errores graves de procedimiento y además una evidente tergiversación de los tratados y normativas internacionales, buscando inducir a error a la Corte.
Esta inconstitucionalidad para los artistas no es un caso más, ni algo insignificante… es a la fecha el caso más emblemático que han tenido, y que determinará nada más ni nada menos que su futuro, y el del desarrollo de la industria musical en el país.
En MUSICARTES defendemos que el artista merece vivir dignamente de su labor; los aplausos llenan el alma de un artista, pero no pone dinero en sus bolsillos, ni lleva la comida a la mesa de su familia; no paga los instrumentos musicales que usan para trabajar, ni les trae el dinero que se invierte para grabar una canción para que todos puedan después disfrutarla. Si un pintor puede ponerle precio a su cuadro, un abogado fijar sus honorarios, y una radio poner el precio de su pauta, los artistas y demás titulares deben poder fijarle, el precio a su arte. La música es propiedad privada.
El resultado de esta inconstitucionalidad es tan relevante; porque lo que se pretende realmente es cercenar el único medio que los artistas tienen para poder recibir ingresos por la explotación pública que se hace de su música, que es a través de las entidades de gestión colectiva.
MUSICARTES, en representación de nuestros asociados, artistas musicales, hace un llamado a los magistrados de la Corte a que se dicte una resolución apegada a derecho, en respeto a la propiedad intelectual, a los derechos constitucionales y humanos que asisten a los artistas.
Fuente. Periódico Digital Centroamericano y del Caribe