La escoliosis es una curvatura de lado a lado de la columna vertebral que puede presentarse en aproximadamente 1 de cada 300 niños. En los niños en crecimiento, las curvaturas pueden aumentar rápidamente de tamaño, en especial durante el estirón de la adolescencia. Las curvaturas grandes pueden seguir avanzando lentamente en la etapa de la adultez, y provocar finalmente dolor de espalda y, a veces, problemas respiratorios. La Dra. A. Noelle Larson, cirujana ortopédica pediátrica de Mayo Clinic, comparte los aspectos básicos de esta afección y las opciones de tratamiento.
Si bien se han logrado avances significativos para tratar la escoliosis infantil, la detección temprana y el tratamiento con aparatos ortopédicos son siempre las primeras opciones, comenta la Dra. Larson. Por lo general, los aparatos ortopédicos pueden recetarse para tratar curvaturas leves o moderadas manteniendo la columna vertebral en una posición corregida mientras crece. Los aparatos ortopédicos pueden evitar que la curvatura empeore, pero no suelen enderezar la alineación de una columna vertebral curvada. La fisioterapia puede ayudar a controlar el dolor y mejorar la postura.
Según la Dra. Larson, las familias disponen ahora de varias opciones de tratamiento quirúrgico de conservación del movimiento para la escoliosis moderada a grave que pueden conservar la flexibilidad y el crecimiento de la columna vertebral. Entre estas opciones se incluyen las siguientes:
•Anclaje de cuerpo vertebral. Se accede a la columna vertebral a través de pequeñas incisiones en el costado, y se usa una cámara especial durante la cirugía. Se colocan tornillos metálicos en las vértebras donde la columna vertebral está curvada, y un cordón de plástico conecta estos tornillos. El cordón se tensa para acortar el lado largo de la curvatura de la escoliosis, y actúa como un aparato ortopédico interno. A medida que los niños crecen, la curvatura puede corregirse con el tiempo. El cordón es flexible, por lo que la columna vertebral podrá seguir moviéndose y creciendo. Los pacientes pueden volver a practicar todos los deportes en 6 semanas.
•Distracción dinámica posterior. Se realiza una incisión en la espalda. Se colocan tres tornillos y se conectan con una sola varilla con dos articulaciones con rodamientos de bolas para permitir el movimiento y el crecimiento.
•Fusión espinal. Se realiza una incisión en la espalda. Se colocan tornillos y varillas en la zona curvada de la columna vertebral, y luego se estira la columna vertebral a una posición corregida. Se retiran las pequeñas articulaciones de la parte de atrás de la columna vertebral. Este proceso crea una lámina sólida de hueso o una fusión en la parte de atrás de la columna vertebral, que es muy duradera. Después de la fusión, en la zona donde la columna vertebral está fusionada, esta ya no crece ni se mueve. En la mayoría de los casos, la zona no fusionada de la columna vertebral puede compensar, y los niños pueden realizar la mayoría de las actividades cotidianas y volver a practicar la mayoría de los deportes en un plazo de tres a seis meses.
•En el caso de los niños muy pequeños para una cirugía de fusión, se pueden usar varillas especiales que contienen un dispositivo magnético. Las varillas magnéticas se fijan a la columna vertebral por encima y por debajo de la curvatura de la escoliosis. Los pacientes acuden a la clínica varias veces al año y las varillas se alargan varios milímetros cada vez con el niño despierto. Una vez que se completó la mayor parte del crecimiento del niño, se retiran las varillas y la columna vertebral se fusiona en una posición corregida.
«Hay continuos avances en la investigación de la atención médica de escoliosis para que el tratamiento tenga el mayor éxito posible y se reduzca el impacto de la enfermedad», afirma la Dra. Larson.
El uso de la navegación y la robótica durante la cirugía puede aumentar la precisión de la colocación de los tornillos y hacer que la cirugía sea más segura para los pacientes, afirma la Dra. Larson. Se hace hincapié en el control del dolor después de la cirugía, ya que muchos centros usan métodos especiales para administrar analgésicos alrededor de la zona de la cirugía (anestesia regional) y reducir la necesidad de analgésicos narcóticos durante el período de recuperación. La administración de medicamentos especiales y los tiempos quirúrgicos más breves han disminuido significativamente la pérdida de sangre y han permitido que los pacientes dejen el hospital a los pocos días.
El inicio temprano del tratamiento con aparatos ortopédicos es la mejor forma de evitar la cirugía, afirma la Dra. Larson. Sin embargo, las modernas estrategias de manejo del dolor, la navegación y la llegada de las cirugías de conservación del movimiento pueden mejorar los resultados de salud y acelerar el ritmo de recuperación si es necesaria la cirugía.
Fuente. Mayo Clinic