A dos años de la pandemia de COVID – 19 la comunidad científica ha recopilado las secuelas de mediano y largo plazo de la enfermedad, las cuales incluyen un amplio rango de padecimientos que pueden extenderse por semanas, meses o hasta años en algunos pacientes. A juicio de muchos expertos se estima que es posible que las afecciones posteriores al padecimiento del COVID-19 no afecten a todos los pacientes de la misma manera.
La Dra. Dalia McCoy, especialista en medicina familiar de Cleveland Clinic, explicó que estas condiciones de salud suelen presentarse en mayor frecuencia en pacientes que padecieron enfermedad severa, aunque cualquier persona que haya padecido COVID – 19, es susceptible a experimentar síntomas post enfermedad, incluidas aquellas que hayan presentado una versión leve o asintomática.
Asimismo, destacó que las personas no vacunadas contra el COVID – 19 que contrajeran la enfermedad podrían tener un mayor riesgo de desarrollar condiciones post COVID en comparación a personas vacunadas que contrajeran la infección. Algunos de los síntomas más frecuentes son:
- Fatiga un 58%
- Dolor de cabeza 44%
- Desordenes de la atención 27 %
- Caída del cabello 25%
- Disnea 24%
- Anosmia (pérdida total del olfato) 21%
- Dolor en articulaciones y tos 19%
- Malestares y dolor en el pecho, pérdida de memoria y náuseas 16%
Listado que incluye un total de 200 síntomas que afectan diversas áreas del cuerpo como lo son el sistema respiratorio, sistema neurológico (cambios en sabor, olor), sistema cardiovascular (tromboembolias, palpitaciones) y musco esquelético, enfermedad crónica de los riñones, afecciones del sistema digestivo, alteraciones en ciclos menstruales, entre otros. Además, se documentó que el 80% de los pacientes de COVID – 19 presentaron al menos uno de los síntomas después de su recuperación.
Aspectos psicológicos también juegan un papel importante, se han registrado la ansiedad y el trastorno por estrés post traumático en algunos pacientes, por lo que una atención pertinente es requerida. A los que se suman síntomas neuro cognitivos como perdida parcial de la memoria y confusión.
La Dra. McCoy, también compartió el listado de personas que se consideran más propensas a tener síntomas de largo plazo post COVID – 19. Entre las que se aquellos que hayan padecido una enfermedad severa, especialmente quienes estuvieron hospitalizados o en cuidados intensivos, pacientes con condiciones de salud crónicas o subyacentes previas a infectarse con la enfermedad, pacientes no vacunados, y quienes hayan experimentado síndrome de inflamación mutisistémica durante o después de la enfermedad por COVID – 19.
En cuanto al tratamiento, cada uno de los síntomas debe ser documentado por médicos y pacientes a fin de darles el respectivo tratamiento según el caso, con el objetivo de alcanzar una rehabilitación, mejora de la salud general y calidad de vida de cada paciente. En el caso de padecimientos respiratorias por ejemplo terapias tanto de ejercicios, como el uso de medicamentos serán necesarios, terapias de lenguaje, rehabilitación neurológica, ejercicios para la fatiga crónica, entre otras deben contemplarse.
Fuente. Cleveland Clinic