El destino turístico de Cuba reabre bajo la égida de Memories Blue Diamond Resorts, con la mira siempre en el pleno disfrute de las tantas bondades de este paraje único
Cuba. Cayo Largo del Sur con su mágico encanto vuelve a ser uno de los destinos de excelencia en Cuba, ahora administrado por Blue Diamond and Resorts y el grupo hotelero cubano Gran Caribe en una alianza estratégica e integral, concebida al detalle con servicios terrestres, aéreos y marítimos que complementan la estancia en las once instalaciones hoteleras del entorno, totalmente remodeladas con nuevos conceptos de diseño y decoración.
La llegada del vuelo inaugural de turistas canadienses fue una fiesta. Este primer mercado, amante y fiel al Cayo que resulta para muchos tan familiar y acogedor – demostrado desde el mismísimo arribo- trasladó hasta allí a 287 visitantes procedentes de Toronto y Montreal en sendos vuelos de la línea aérea flySunwing. Los hoteles Memories Cayo Largo, Starfisch Cayo Largo y la villa Linda Mar les dieron la bienvenida.
Para esta primera etapa de reapertura se suma además la villa Marina y paulatinamente se incorporarán los hoteles Gran Memories Cayo Largo, Sanctuary y 6 villas restantes ( Serena, Natura, Coral, Soledad y Capricho, todos ajustados a las 9 marcas de esta empresa canadiense afianzada en los principales destinos del Caribe, según explica Miguel García, director de Comunicación Corporativa de Blue Diamond and Resorts en Cuba.
Llama la atención la línea constructiva que realza las tipicidades de cada alojamiento. Predominan los espacios abiertos, la jardinería, el servicio personalizado, se multiplican las áreas de entretenimiento. Para el segmento de familia Memories Cayo Largo y Starfish disponen de 296 y 307 habitaciones, respectivamente, con esparcimientos acordes a cada edad. Las villas propician un ambiente más íntimo en cabañas y bungalows, ubicadas en su mayoría frente al mar con su gama de tonalidades atractivas.
Las playas Sirena y Paraíso –reconocidas en Trid Advisor entre las mejores del mundo- , y todos los atractivos del Cayo están incluidos en paquetes de excursiones y paseos para lograr estancias inolvidables. Observar puestas de sol en una cena a bordo del Catamarán Cayetana, visitar la Casa del Campesino y la Taberna, el Pueblo Tour, conocer de historia y tradiciones, subir hasta el mirador con su vista exclusiva, paseos en Moto y jeep, fiesta de playa o en la cubierta del barco, el buceo en la barrera coralina, llegar hasta la Isla de las Iguanas o un baño en la playa natural en medio del mar son algunas de las tantas ofertas de Cubatur, receptivo exclusivo de Cayo largo del Sur.
Una vez estabilizadas las frecuencias de los vuelos domésticos, también están programadas visitas a la Habana colonial, pasa días procedentes de Varadero y opciones que se sumarán paulatinamente hacia otras ciudades cercanas. El aeropuerto Vilo Acuña fue totalmente remodelado y amplió las dimensiones de la pista para recibir vuelos de gran porte.
Distingue a este paraje de la naturaleza cubana el Centro de Rescate de Tortugas donde un proyecto medioambiental gana cada vez más seguidores de todo el mundo por el noble propósito de un equipo de biólogos marinos de recoger a tiempo de las arenas y con sumo cuidado los tantos huevos de quelonios que antes se perdían producto de los efectos del cambio climático. Luego los cultivan en sus piscinas naturales y devuelven a los “bebés” con dos meses de nacidos a su medio natural en un ritual tan humano y sensible y en el que participan los turistas. Sin dudas una verdadera clase de cuidado y protección a las especies del mar.
Hay una presencia notable de la cultura nacional. Música, baile, artes plásticas, artesanías y la tradicional ceremonia de la Llana, árbol típico asociado a leyendas de corsarios y piratas en la zona. Un toque a su frondoso tronco impregna fuerza, energía y sobre todo el deseo de volver.
Dondequiera se respira unidad, fraternidad, sentido de pertenencia, algo que siempre ha caracterizado al destino Cayo largo del Sur. trabajadores procedentes de distintas regiones del occidente cubano viven y trabajan allí en un régimen alternado de estancia y descanso. Muchos volvieron después de la pandemia, otros se forman en la marcha, pero hay un pensamiento colectivo que los une: la familiaridad del Cayo. No por casualidad los canadienses llegan buscando a sus fieles amigos cubanos
Para Miguel García “ya se rompió el hielo”, después de tanto esfuerzo en la nueva concepción del producto y luego del receso obligado por la pandemia del COVID 19. Pronto se sumarán los mercados italiano, ruso y argentino, habituales también.
Hay mucha confianza y seguridad en esa recuperación paulatina de un destino sin igual, afirma el Director General de Blue Diamond and Resorts Cuba, Mohamad Fawzi. Ya hay servicio de WIFI gratis en todas las instalaciones, se aplica la modalidad del todo incluído y seguirán los sueños para buscar nuevos nichos y ampliar las capacidades hoteleras y extra hoteleras donde el sol nace para siempre.
Fuente: María Lucía González / Periódico Digital Centroamericano y del Caribe.
