Panamá. El presidente de la República, Laurentino Cortizo, confirmó que en las últimas dos semanas ha disminuido el flujo irregular de migrantes venezolanos “considerablemente”, pero ha aumentado el paso de personas de Haití y Ecuador.
“Las dos nacionalidades que están aumentando son los haitianos y ecuatorianos y estamos muy pendientes de eso”, comentó Cortizo, durante los actos protocolares del 3 de noviembre.
El mandatario indicó que las discusiones del tema migratorio las trabajan de una manera conjunta, no solo institucionalmente sino con otros países, como Colombia, Costa Rica y Estados Unido.
Mencionó que este tipo de acercamientos es “fundamental” para los avances que buscan sobre el tema migratorio.
Recalcó que este 1 de noviembre la canciller Janaina Tewaney Mencomo asistió a una reunión con sus homólogos de Colombia y Costa Rica para tratar el flujo de migrantes en tránsito hacia Norteamérica.
“Queremos que este tipo de reuniones se aprovechen y sean francas y no protocolares porque al final el tema (migratorio) no es solo de Panamá sino de muchos países”, señaló Cortizo.
Un muro invisible
Muchos venezolanos han desistido de continuar su recorrido rumbo a Estados Unidos, luego que el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, en inglés), contemplara el pasado 12 de octubre la deportación inmediata a territorio mexicano de los migrantes que cruzan irregularmente la frontera terrestre.
Para el 28 de octubre, el Sistema Nacional de Migración (SNM) registró que de los 477 migrantes irregulares que ingresaron al país por Darién, apenas 54 eran de nacionalidad venezolana.
Para el mes de octubre, la entidad contabilizó 57,304 migrantes, de las cuales, 40,360 son venezolanos.
Según el SNM, en lo que va del 2022, han ingresado al país en el flujo de migrantes irregulares la cifra récord de 208,866 personas, restando aún poco más de dos meses para terminar el año; de esta cantidad, 148,052 son de nacionalidad venezolana.
De esa cantidad, unos 1,123 migrantes están distribuidos entre las cuatro estaciones de recepción de migrantes, de las cuales, 1,123 son hombres, 230 mujeres, 149 niños y 132 niñas.
En tanto, en la ciudad capital hay otros grupos de migrantes venezolanos que llegan a un albergue temporal de la Embajada de Venezuela, situado en La Locería, para gestionar su retorno voluntario a su país a través de la compra de boletos aéreos que rondan los $280.
Hasta el 31 de octubre, unos 3,800 venezolanos que se encontraban en el albergue ya han regresado a su país, a través de vuelos humanitarios, según reporta EFE.
La subdirectora de Migración, María Isabel Saravia, declaró que la gran mayoría de estas personas han tramitado su regresó a Venezuela por sus propios medios económicos, y otros mediante colaboración.
La funcionaria destacó a EFE que se realizan coordinaciones con Costa Rica y Colombia con el fin de ejecutar acciones conjuntas entre los tres países desde sus direcciones de migración, para proteger a estas personas de su vulnerabilidad como migrantes y asistirlos en su retorno.
En este contexto, Colombia convocó a Panamá y a Costa Rica a una mesa técnica en el Parlamento Andino para marzo de 2023 con el propósito de anticipar las propuestas más viables que puedan ejecutarse para enfrentar el flujo de migrantes por la región.
“Estamos convocando a todos los países para promover las propuestas en un espacio latinoamericano, tomando en cuenta que se trata de un problema regional, y de esta misma dimensión deben ser las soluciones”, dijo a ‘La Decana’ el director de Migración de Colombia, Fernando García, luego de sostener la reunión con la canciller panameña.
El director de migración de Colombia manifestó que durante el encuentro pusieron sobre la mesa algunas propuestas a EEUU que estudiará en los próximos días. Dichas sugerencias también pueden ser acogidas por cada Estado para decidir sus propias políticas.
Fuente: La Estrella de Panamá.