La neumonía es un tipo de infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones, y que puede ser causada por bacterias, virus u hongos. Los Centros para el control y la prevención de enfermedades de Estados Unidos, CDC, estiman que, anualmente afecta a millones de personas en todo el mundo, de ahí la importancia de la inmunización y de poner en práctica estilos de vida saludables.
Según la Asociación Americana del Pulmón, “los virus respiratorios son la causa más común de neumonía en niños y adultos jóvenes, mientras que el virus de la gripe es la causa más común de neumonía viral en adultos. Otros virus que causan la neumonía incluyen el virus respiratorio sincitial, el rinovirus, el virus del herpes simple, el virus de síndrome respiratorio agudo severo, entre otros”.
Es primordial conocer la causa de la neumonía, pues de eso depende el manejo adecuado de la enfermedad. Pese a que algunas personas tienen un riesgo más alto que los demás de desarrollar esta afección, es de considerar que, para los bebés y los niños pequeños, así como para los adultos mayores de 65 años, la severidad de la neumonía puede ser mayor – hasta letal; sin dejar de lado, a las personas con antecedentes crónicos de salud, y quienes tienen un sistema inmunológico débil, como resultado de enfermedades o de otros factores.
Resulta necesario tomar conciencia sobre la importancia de la inmunización, debemos entender que es un componente clave que salva millones de vidas en todo el mundo, durante más de 40 años, el éxito del Programa Ampliado de Inmunización (PAI) ha hecho de la Región de las Américas un líder mundial en la eliminación y el control de las enfermedades prevenibles mediante vacunación, así lo indica la Organización Mundial de la Salud, OMS.
Neumonía neumocócica: la causa de miles de hospitalizaciones cada año
Vale la pena entender que, la enfermedad neumocócica, es causada por el neumococo, un tipo de bacteria estreptocócica, que se puede transmitir de persona a persona mediante la tos, los estornudos y el contacto cercano. Las personas pueden tener las bacterias en la nariz y la garganta sin estar enfermas y transmitirlas a otras personas, a estas se les denomina «portadores».
Se estima que aproximadamente, 1 de cada 6 adultos que contraen este tipo de bacteria mueren,9 de este modo, es de vital importancia su reconocimiento oportuno; no obstante, los síntomas pueden variar dependiendo de la parte del cuerpo que las bacterias estén afectando, por ejemplo, en la sinusitis y las infecciones de oído por lo general son relativamente leves, presentándose tos, fiebre, dolor de oído y de garganta.
Sin embargo, en la neumonía, las infecciones del torrente sanguíneo y la meningitis, los síntomas suelen ser más graves, estos pueden ser fiebre o escalofríos, tos, respiración rápida o dificultad para respirar, dolor en el pecho, dolor de cabeza, rigidez de cuello, mayor dolor al mirar luces brillantes, confusión o bajo nivel de alerta.
Al ser esta una enfermedad contagiosa, que puede ocasionar diferentes problemas de salud, incluso infecciones graves en los pulmones, en la capa de tejido que recubre el cerebro y la médula espinal, y en la sangre; cobra sentido el poder de la inmunización; vacunarse es la mejor manera de prevenir esta infección bacteriana.
Gabriela Ábalos, directora Médica de Vacunas para la Latinoamérica de Pfizer, destaca la trayectoria de 175 años de la compañía, en investigación, desarrollo, y compromiso cambiando el resultado de enfermedades devastadoras a través de la ciencia. La inmunización es un logro ejemplar de la salud,6 permitiendo a las personas crecer, prosperar y contribuir a sus comunidades. Pfizer ha sido líder en la reducción de la carga mundial de la enfermedad neumocócica durante más de 20 años y está trabajando para brindar una mayor protección.
Considerar las siguientes prácticas de vida saludables puede ayudar a proteger su salud y prevenir infecciones respiratorias:
•Lávese las manos.
•Antes de entrar en contacto con una superficie, límpiela y desinfecte.
•Al toser o estornudar, cúbrase la boca y nariz con un pañuelo desechable, o la parte interior del codo o la manga.
•No fume y limite su exposición al humo del cigarrillo.
•Controle las afecciones persistentes, como asma, diabetes o enfermedades cardiacas.
Fuente. Pfizer