Panamá. La cosecha de 95 mil toneladas de caña de azúcar, sembradas en 1,500 hectáreas, es la meta establecida por Varela Hermanos, S.A., para la temporada de zafra 2022.
“Si bien el 70% del corte de la caña de azúcar se realiza de forma mecanizada, utilizando modernas máquinas cosechadoras, el 30% se hace de forma manual, dada la topografía quebrada de nuestros terrenos, lo que se traduce en una generación adicional de empleo de mano de obra local de 300 colaboradores temporales del Distrito de Pesé, Provincia de Herrera”, señaló José Javier Dopeso, Vicepresidente de Operaciones de Varela Hermanos.
En promedio, con el inicio de la zafra, una de cada cuatro familias del área forma parte o está vinculada a este proceso, un total de 12% de la población de Pesé.
Dopeso señaló que esta actividad, que se realiza durante los meses de enero a abril, aporta a la economía de la Provincia de Herrera, con la generación de plazas de empleo.
Las jornadas de corte se llevan a cabo de lunes a sábado de 5:30 a.m. a 11:30 a.m. Durante las primeras horas de cada cosecha diaria, los cortadores practican el canto interiorano conocido como “Saloma”, realizado para dar fuerza y motivación durante la jornada.
Cada día se cortan unas 15 hectáreas de caña de azúcar; el corte debe ser oblicuo en la parte inferior, para permitir el rebrote y garantizar la calidad de la caña para el siguiente año. Durante el proceso de corte, se eliminan las hojas, conocidas como el “cogollo”, que luego serán junto al “bagazo” el combustible para las calderas de vapor necesarias para los procesos que siguen a continuación.
Una vez cortada la caña inicia el proceso de molienda; la caña es triturada en un moderno molino con capacidad para procesar un volumen de 950 a 1000 toneladas de caña cada día, que producen aproximadamente 760,000 litros de jugo de caña diarios. Luego se procede con la fermentación del jugo de caña, de donde posteriormente se obtiene el vino, que es destilado para la producción de ron fresco (aguardiente de ron) y el alcohol extra neutro en la Destilería Don José.
La empresa cuenta con ocho tipos de variedades de caña procedentes de Barbados, Brasil, República Dominicana y el norte de Argentina.
Desde hace más de 15 años, buena parte de la caña se cosecha “en verde”; hoy representa aproximadamente el 60%, pese a que la ley exige solo un 5%; esto permite una operación sostenible y responsable con el medio ambiente, al utilizar biomasa (cogollo y bagazo) como la principal fuente de energía para los procesos productivos, sustituyendo el uso de combustibles fósiles.
Este período de zafra 2022, que tendrá una duración de 100 días, inició el pasado 11 de enero con la tradicional misa en honor a San Isidro Labrador, en donde se bendice la cosecha y a todos los trabajadores que participarán en ella, y se pide por el desarrollo de Pesé y Panamá. “Con esta misa honramos una tradición de mi abuelo Don José, recordamos a todos los que nos antecedieron, encontramos inspiración para el futuro, y nos proponemos seguir trabajando por Panamá”, señaló ese día el Ing. Luis J. Varela Jr. Presidente y CEO de la empresa.
Sobre la zafra
Las primeras zafras nacionales se dan durante la primera década de la República de Panamá; en Pesé a partir del año 1908, con el inicio de operaciones del Ingenio San Isidro, primero del país. Los productores de caña para el ingenio, conocidos como “colonos”, llevaban su caña en carretas movilizadas por bueyes al ingenio.
Más de un siglo después, en Hacienda San Isidro se mantiene esa tradición, con dos carretas de bueyes que son conducidas por Don Celestino y Don Vicencio, conocidos hombres de Pesé, que tienen más de veinticinco años trabajando en esa actividad.
La siembra de caña se realiza durante los meses de junio y julio, y cada cinco años se renueva el campo con una semilla nueva.
Fuente. Periódico Digital Centroamericano y del Caribe
