Costa Rica. Recientemente se realizó un intercambio de experiencias sobre gestión de corredores biológicos en Costa Rica junto a una delegación de República Dominicana en el marco del proyecto de Cooperación Triangular “Fortalecimiento de capacidades para la gestión territorial sostenible de los Corredores Biológicos de República Dominicana”.
Este proyecto de Cooperación Triangular es financiado por el Fondo Regional para la Cooperación Triangular en América Latina y el Caribe e implementado por la Cooperación Alemana para el Desarrollo, GIZ, por encargo del Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ).
El intercambio de experiencias se realizó en el marco de la Octava edición del Festival de la Danta, entre el 16 y 21 de septiembre. La delegación dominicana conoció de primera mano el festival celebrado en el Corredor Biológico Tenorio-Miravalles (CBTM) e inspirado en los cambios positivos ocurridos en este corredor con respecto a la coexistencia entre comunidades locales y la fauna silvestre local.
El Festival de la Danta permite sensibilizar e informar a las comunidades locales y visitantes de la zona, sobre la importancia de proteger la danta o tapir (Tapirus bairdii), el mamífero terrestre más grande de Centroamérica y especie bandera del CBTM. Desde su creación, este festival ha contribuido con la promoción y reconocimiento de los esfuerzos comunitarios por conservar el hábitat de la danta, así como en promover el desarrollo sociocultural y económico de la zona en torno a este gran mamífero.
Svenja Paulino, directora del Programa Biodiversidad y Negocios para Centroamérica y República Dominicana de la GIZ, enfatizó la relevancia que tienen estas iniciativas para la protección de la biodiversidad a nivel regional. “Los corredores biológicos son esenciales para conectar hábitats y permitir el libre tránsito de especies, lo que fortalece la resiliencia de los ecosistemas ante la pérdida de la biodiversidad en la región. La cooperación entre Costa Rica y República Dominicana en este ámbito es un paso clave para fomentar la colaboración entre países al compartir experiencias como el Festival de la Danta, que inspira a las comunidades locales a convertirse en actores activos en la protección de las especies y sus hábitats”, afirma Paulino.
Este intercambio reunió en Costa Rica a representantes dominicanos del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, Ayuntamiento Municipal de Azua, La Asociación de Productores de Banano Orgánico de Azua, AZUABANA y Grupo Ambiental Hábitat. Esta delegación, visitó el CBTM para conocer el trabajo colaborativo que se realiza entre el Sistema de Áreas de Conservación de Costa Rica (SINAC), organizaciones no gubernamentales que trabajan localmente en investigación para la conservación, comunidades locales y propietarios de fincas, para gestionar los recursos naturales y proteger especies como la danta.
Durante la semana de intercambio, los participantes presenciaron la dinámica de los comités locales como plataformas integradoras de actores para la planificación territorial y la gestión de corredores biológicos. Además, participaron en actividades educativas y de campo para conocer los elementos focales de manejo del CBTM, como los bosques y la protección de su especie bandera, la danta.
«Para el MINAE es un honor poder compartir experiencias y lecciones aprendidas en este tema de corredores biológicos y otros aspectos de conservación ambiental», afirma el viceministro de Ambiente en Costa Rica, Jorge Mario Rodríguez.
El intercambio incluyó un recorrido por la Reserva Santuario de la Danta en Costa Rica, donde los representantes de este proyecto conocieron el modelo de gobernanza comunitaria en la administración del recurso hídrico y su importancia para la sostenibilidad del corredor. Este modelo, liderado por las Asociaciones Administradoras de Sistemas de Acueductos y Alcantarillados Comunales (ASADAS), resguarda fuentes de agua vitales para las comunidades locales y para la conservación de la biodiversidad.
En República Dominicana, este proyecto será adaptado al contexto local para implementar el primer Corredor Biológico en el país en la provincia de Azua. La experiencia costarricense, especialmente en la integración de actores comunitarios y la aplicación de herramientas de monitoreo y planificación, será fundamental para el desarrollo de esta iniciativa piloto que busca replicar el éxito obtenido por el CBTM.
“La realización de festivales culturales para resaltar la biodiversidad de nuestros pueblos es una clara muestra de cómo el involucramiento de las comunidades locales puede transformar la percepción y protección de los recursos naturales. Estamos muy motivados de llevar estas lecciones aprendidas a República Dominicana para impulsar la creación de nuestro primer corredor biológico”, comenta Clara María Aquino Smester, Directora General Dirección General de Cooperación Bilateral Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPYD)
Esta colaboración entre Costa Rica, República Dominicana y Alemania, demuestra cómo el intercambio de experiencias, casos de éxito y lecciones aprendidas en el contexto de la cooperación internacional, pueden ser catalizadores para la conservación de la biodiversidad en la región. Con la mirada puesta en el futuro, se espera que estas buenas prácticas se repliquen por otros países de América Latina y el Caribe para continuar trabajando juntos en la protección de los recursos naturales y sus servicios ecosistémicos.
Fuente. GIZ