Cuba. Para conocer en vivo y en directo su proceso de elaboración totalmente a mano, los participantes del XXIII Festival del Habano visitaron hoy las fábricas de Partagás y La Corona en esta capital.
En la Fábrica de Tabaco torcido Partagás, marca a la que está dedicada el evento, conocieron los procesos de despalillo, ligada, torcido y escogida, entre otros, por los que pasan las hojas de tabacos para convertirse en los reconocidos puros.
La institución, una de las más reconocidas en el mundo del Habano por su afamada calidad de resultado, es la fábrica matriz de las vitolas de la marca homenajeada, compuestas por tabacos seleccionados de la zona de Vuelta Abajo, Pinar del Río.
Los Habanos en general son los únicos puros en el mundo que aún se elaboran totalmente a mano. En las fábricas pasan por el proceso de recepción y acondicionamiento de las hojas y la selección de las capas.
Luego, van a las despalilladoras, que retiran la vena central dividiendo la hoja en dos mitades, y después a los rezagadores, que las clasifican de acuerdo con su color, tamaño y textura.
El siguiente paso se desarrolla en la galera, donde los torcedores elaboran las diferentes vitolas. De ahí pasan a la zona de escogida, donde otra vez son clasificados por tonos y colores y guardados en las cajas.
Según explicó el guía de la fábrica, Agustín Rodríguez, la institución cuenta con alrededor de 400 trabajadores, la mayoría de ellos en la galera, de los cuales el 60 por ciento aproximadamente son mujeres.
El Festival del Habano, que se realiza en Cuba desde 1994, se extenderá durante cinco días con encuentros, catas, presentaciones, muestras y debates, en los que participan invitados de más de 70 países.
Fuente: PL.