Guatemala. En el ciclo escolar 2025, el programa Educando para Conservar, impulsado por la Asociación Amigos del Lago de Atitlán (AALA), concluyó con éxito la Fase 1 en 50 centros educativos del departamento de Sololá, beneficiando a 3,500 estudiantes y 171 docentes y directores. Esta iniciativa busca fortalecer el conocimiento y compromiso ambiental en la comunidad educativa para promover la conservación del Lago de Atitlán y los recursos naturales y culturales de la región.
Desde su inicio en 2016, el programa ha alcanzado 17 de los 19 municipios del departamento, impactando a más de 21,620 estudiantes, 928 docentes y 1,550 padres y madres de familia. Su metodología se desarrolla en tres fases a lo largo de tres años, con acompañamiento técnico y pedagógico que instala capacidades duraderas en los centros educativos.
Durante esta séptima edición, se utilizó el Material de Referencia Educando para Conservar, compuesto por 7 módulos temáticos: Medio Ambiente, El Bosque, El Agua y las Cuencas Hidrográficas, El Suelo, Saneamiento Ambiental, Conservación de Bienes y Servicios Ambientales, y Valoración de Recursos Naturales y Culturales. Este material fue elaborado de forma participativa con el equipo técnico de la Asociación y otras instituciones con enfoque ambiental y cultural.
“Creemos que la educación, así como las metodologías, son cambiantes y deben adaptarse a las necesidades actuales. En Asociación Amigos del Lago de Atitlán (AALA) percibimos la educación ambiental como un proceso continuo y fundamental para adquirir conciencia, valores y actitudes encaminadas a un comportamiento ecológico y ético”, comentó Anna D´Apolito, directora de la Asociación Amigos del Lago de Atitlán (AALA).
Además de la entrega del material, se brindaron capacitaciones a docentes y directores, apoyando la planificación y ejecución de actividades de campo. El programa cuenta con el respaldo de marcas comprometidas con la educación ambiental como Disagro, Productos del Aire, Tecniseguros, Agua Pura Salvavidas, Super Cola y Focus Central America, quienes aportan recursos económicos canalizados de forma transparente.
La aceptación del programa se evaluó mediante encuestas a docentes y diagnósticos aplicados a estudiantes, mostrando resultados positivos en la instalación de conocimientos ambientales y el fortalecimiento técnico del cuerpo docente.
Educando para Conservar continúa siendo un referente en educación ambiental en Guatemala, demostrando que el trabajo conjunto entre comunidad, instituciones y sector privado puede generar cambios significativos en la protección de nuestro entorno.
Fuente. AALA