Guatemala. El término “fraude” tradicionalmente se asocia con el uso de billetes o cheques falsos para engañar a una empresa, pero debido a la tecnología, este ha evolucionado al ámbito digital, donde puede actuar de forma más rápida y oculta. Tan solo en el 2023, más de 353 millones de personas vieron su identidad comprometida según el reporte de brechas de datos 2023 realizado por el Centro de Recursos para el Robo de Identidad (ITRC, por sus siglas en inglés).
Esteban Pinetta, del departamento Anti-Fraude de SISAP, indicó que, en su gran mayoría, el fraude se origina de forma interna dentro de la empresa, por medio de colaboradores deshonestos o inconformes. “Muchos empresarios no logran visualizar que el fraude puede darse por dos vías, y mientras buscan protegerse de amenazas externas, dejan abajo sus defensas a nivel interno”, aseguró.
“Si le preguntamos a alguien si en su empresa hay fraude, este seguramente responderá que no. El problema es que el fraude por su naturaleza está oculto, por lo que cuando finalmente se den cuenta de su existencia ya será demasiado tarde”, comentó Pinetta.
El fraude en números alrededor del mundo
El fraude digital es un fenómeno que afecta a nivel mundial, de acuerdo con ACFE, las organizaciones pierden al menos un 5% de sus ganancias debido a fraudes, lo que equivale a más de 3 mil millones de dólares alrededor del mundo.
Los autores de fraude en las organizaciones cometen sus fechorías en promedio por 12 meses o más tiempo, antes de ser descubiertos, pero incluso hay casos donde se han comprobado fraudes por hasta 3 y 5 años sin que nadie lo notara.
De acuerdo con la Superintendencia de Bancos de Guatemala, en 2023 se presentaron 38 denuncias y ampliaciones por el delito de estafas por medios electrónicos, mismas que ascienden a la suma de Q319.52 millones. Esto crea la necesidad en toda empresa de velar por la seguridad de sus consumidores y evitar exponerlos al riesgo de ser víctimas de fraude.
El estudio “Faces of Fraud”, publicado por el SAS Institute en el 2023, indica que el 67% de los consumidores cambiaría de proveedor si llegara a ser víctima de fraude por causa de ellos, o bien, si otra compañía ofreciera mayor seguridad contra el fraude, ya que el 89% opina que las compañías deben realizar más acciones para protegerlos del fraude.
Para los consumidores, un caso de fraude representa un gran impacto financiero debido a las pérdidas económicas que trae consigo. Especialmente cuando se toma en cuenta que solo el 32% de los consumidores ha tenido éxito en recuperar el dinero que perdió, mientras que el 68% restante no ha sido tan afortunado, según datos del Informe Sobre Fraude A Consumidores En España 2023-2024 realizado por la Asociación Española de Empresas Contra el Fraude.
SISAP recomienda cómo prevenir el fraude digital en una empresa
Los expertos de SISAP comentan que, gracias a los avances tecnológicos y experiencias recopiladas a través de los años, se pueden implementar soluciones enfocadas en análisis del comportamiento y sistemas de monitoreo transaccional, que apoyan a detectar cuando existen escenarios de fraude en las organizaciones que podrían haber pasado desapercibidos durante mucho tiempo.
“Al analizar experiencias previas en muchas organizaciones, se logran establecer patrones de comportamiento que nos ayudan a evaluar con mayor precisión los procesos internos en las organizaciones y establecer controles basados en las mejores prácticas que existen a nivel mundial” comentó Rita Cobar, gerente del departamento Anti Fraude Digital de SISAP.
La experta comentó que, de acuerdo con estudios de ACFE, al combinar sistemas de monitoreo de transacciones junto con programas de concientización Anti-Fraude, se reducen en más de 27% las probabilidades de que las organizaciones sean víctimas de fraudes.
En caso desee solicitar más información acerca de este servicio y las formas en que puede prevenir el fraude dentro de su empresa, puede ponerse en contacto con un asesor de SISAP a través de su sitio web: https://www.sisap.com/
Fuente. SISAP