440 estudiantes, 156 docentes, 310 miembros de familia, 16,455 beneficiarios directos e indirectos en Guatemala, Honduras y Costa Rica.
Guatemala. Comunidades Sostenibles es un proyecto que se centra en fortalecer hábitos saludables y promover estilos de vida equilibrados y sustentables a través de talleres educativos que brindan herramientas y conocimientos a niños, niñas, docentes y miembros de la familia para la toma de decisiones informadas sobre su salud física, mental y emocional.
“Este proyecto va más allá de la responsabilidad corporativa, representa un compromiso real y tangible de Cargill y Glasswing International con el desarrollo integral de las comunidades en las que se encuentran. Al empoderar a las personas, conectar con ellas y brindarles las herramientas necesarias para llevar una vida más saludable, se generan impactos positivos no solo a nivel individual, sino también en el entorno social y ambiental”, comentó Angie Céspedes, coordinadora de Responsabilidad Corporativa de Cargill
También, por medio de un video cuento y el desarrollo de huertos escolares, se promueve la alimentación balanceada y se fomenta la participación de los estudiantes en la producción de alimentos saludables.
“Cuando empecé a recibir las formaciones de Cargill, me entusiasmó mucho y aprecié el hecho de que alguien se preocupara por la salud alimentaria de la comunidad. Como docente adquirí un compromiso con el alumnado, deseo que verdaderamente conozcan y practiquen una buena alimentación”, comentó Verónica Tipaz, docente del centro educativo Francisco Col.
Cargill y Glasswing International demuestran que las empresas pueden ser agentes de cambio significativo en la sociedad puesto que, al unir sus conocimientos, recursos y experiencia, crean un legado duradero de bienestar y desarrollo comunitario en Centroamérica.
“Cuando el proyecto de Cargill arrancó me emocioné mucho, especialmente por el enfoque de buena alimentación para niñas y niños. Una de las cosas que me llamó más la atención fue la enseñanza de hacer un huerto, es un aprendizaje muy importante ya que es una manera de tener la comida saludable al alcance. Otro tema que me impactó mucho fue conocer los beneficios y aporte de cada alimento”, compartió Gloria Xol, directora del centro educativo Francisco Col.
Actualmente, este proyecto ha tenido una inversión regional de $150,000 y tiene prevista una segunda fase que se iniciará este año, la cual se centrará en fortalecer la educación en temas de alimentación y hábitos saludables, especialmente en el empoderamiento de las niñas.
Fuente. Cargill