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Este semana, los líderes de América Latina y el Caribe (ALC) tendrán la oportunidad de plantear, ante el mundo, los desafíos y oportunidades que tiene la región, en materia de descabonización y cambio climático.
La Conferencias de las Partes de la Convención de Cambio Climático (COP28), que se realizará en Dubai, entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre, contará, por primera vez en su historia, con un espacio destinado para la región.
Este hecho es visto como algo muy positivo para Alicia Montalvo, quien es gerente de Acción Climática y Biodiversidad Positiva del CAF (banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe. «La región de América Latina y el Caribe es una vía para desarrollar soluciones climáticas y por eso debe tener una representatividad importante en estas esferas», indicó la especialista, durante un foro con medios de comunicación el pasado viernes.
El informe «Perspectivas Energéticas de América Latina», desarrollado por la Agencia Internacional de Energía (AIE), que fue emitido a principios de noviembre, apunta a que la riqueza de recursos de ALC, y la experiencia en su desarrollo (desde energías renovables de alta calidad hasta petróleo y gas y minerales críticos), podrían hacer contribuciones importantes a la seguridad energética global y las transiciones a energías limpias con los paquetes de políticas adecuados, además de impulsar su propia transición y generar importantes beneficios para las economías locales, después de una década de lento crecimiento.
El documento asegura que el 60% de la electricidad que genera la zona es renovable, un porcentaje que supera el doble de la medida mundial. A la par de tener países como: Brasil, Argentina, México y Chile, que son grandes productores de energía eólica y que, junto con otras naciones de la región, están haciendo grandes progresos en el desarrollo de biocombustibles e hidrógeno de bajas emisiones.
«Vamos a hablar de la importancia que tiene los sistemas de alerta temprana y de geolocalización, al habar de los desastres naturales y como podemos cooperar regionalmente, para atenderlos», indicó Montalvo.
Dentro del bloque latinoamericano, también dialogarán sobre el tema energético. «Vamos a hablar de la importancia del gas, como un combustible de transición, pero también de la importancia de invertir en energías renovables. Lo que queremos es poner estos temas sobre la mesa y darles visibilidad», añadió.
La representante de CAF considera que este espacio será vital para escuchar, de primera mano, aquellos países que ya están avanzando sobre estos puntos y que, su prioridad será dar una «visión positiva de la región».
La importancia de Panamá
Al ser cuestionada sobre papel que desempeña Panamá en el proceso de lucha contra el cambio climático, la titular de Acción Climática de CAF, dijo que se trata de uno de los países «más avanzados» en el combate contra las emisiones de dióxido de carbono, al ser una de las pocas naciones del mundo que capta más CO² del que genera.
«Yo creo que los países con una matriz limpia, como Panamá, ya están en una posición muy avanzada», pero, manifestó su preocupación sobre la contribución del cambio climático en la desaparición de islas, en la zona, como Gardi Sugdub.
«Centro América y el Caribe tiene toda nuestra atención, pues son los miembros de CAF más vulnerables», analizó.
«Panamá es uno de los más vulnerables, es algo dramático y eso requiere de financiación y un enfoque ecosistémico, que permita apoyar en solventar esta situación», agregó.
Según Mondalvo, ellos trabajan con base en las prioridades que marcan los países y, a veces, hay gobiernos que tienen otras prioridades. «Nosotros podemos ayudar a solucionar un problema, pero es importante que los países que hablan con CAF prioricen estas soluciones».
Pese a que, la gerente de Acción Climática de CAF no habló sobre el desarrollo minero en Panamá, sí dijo que es necesario prestarle mucha atención a la minería. «La minería está en el foco de atención, porque será fundamental para la obtención de los minerales fundamentales para el proceso de transición energética y la economía global (uranio, cobre, cobalto, manganeso, cromita, tierras raras, germanio, berilio, bauxita, litio y los elementos del grupo del platino)».
«Es un tema que está empezando a tratarse y nosotros en CAF estamos montando grupos de trabajo especializados en esto», anexó.
«La minería tiene dos vertientes, el lado de la generación de recursos económicos y el impacto ambiental que genera. Por encima de todo, debemos procurar que el impacto ambiental sea el mínimo posible. Es algo que debemos desarrollar entre todos, para determinar en qué condiciones se extraen los minerales, dado que son temas muy sensibles», relató.
El desafío de la financiación
La especialista hizo referencia a los fondos que son necesarios para implementar el proceso de adaptación al cambio climático en todos los países del mundo, alegando que detallar un número exacto, es complicado. «En la Cumbre de Glasgow estimaron que había que multiplicar la inversión en este tema x10, para mitigar los impactos del cambio climático. Un número que puede alcanzar los $200 mil millones, por año».
«Nosotros hemos establecido que el 40% de la financiación de CAF, para 2026, será destinada a desarrollo de energías verdes. Entre 2022 y 2026, estamos destinando $25 mil millones», reveló.
Uno de los objetivos principales de este fondo, es invertir en adaptación al cambio climático, no solo en su mitigación, algo que, según Montalvo, no es muy común.
La también consejera económica, alegó que, el problema es que, los compromisos de la última Glasgow no se han cumplido, dado que los países participantes necesitan duplicar su financiación en esta área y eso no se ha concretado.
Fuente: La Estrella de Panamá.