Costa Rica. El trabajo remoto ha traído consigo desafíos tanto para los colaboradores como para las empresas. Aun así, a nivel mundial está dejando de ser una tendencia temporal para instalarse definitivamente en el mundo laboral. Junto a la digitalización, el trabajo a distancia está dando paso a una práctica que ya pisa fuerte en Latinoamérica que es la contratación internacional: la posibilidad de contratar al mejor talento, sin importar su ubicación geográfica.
Hoy en día las compañías pueden enfocar y guiar la búsqueda con base en las capacidades y conocimientos del talento, ya que éste puede vivir en cualquier parte del mundo y aun así formar parte de la empresa. Esto es posible, no solo gracias a las últimas tecnologías y a los innovadores softwares que permiten gestionar y organizar equipos internacionales, sino también a la capacidad de comunicación que demuestren los equipos y directivos y a una cultura sólida que pueda transmitirse a pesar de la distancia.
La contratación internacional ofrece claros beneficios para las empresas, pero al mismo tiempo también desafíos: cómo medir la productividad, cómo gestionar equipos diversos de forma inclusiva, y de qué forma alcanzar los objetivos. Pero en una instancia anterior a la contratación, las empresas deben llegar a una negociación exitosa con el profesional seleccionado, para lo cual es preciso contar con información sobre las tendencias y condiciones de cada mercado.
Si bien Centroamérica y Latinoamérica tienen ciertas características en común como región, cada país tiene sus particularidades y es importante que los equipos de Recursos Humanos las conozcan, para asegurarse de que están ofreciendo a cada talento una oferta competitiva. En todos los países la remuneración es uno de los puntos más delicados al momento de contratar trabajadores remotos.
Por ello, es importante conocer el salario mínimo y promedio de otros mercados, para ofrecer compensaciones que cumplan con las regulaciones de cada país y atraigan al mejor talento. El tipo de remuneración que la compañía ofrezca tendrá variaciones de acuerdo a la actividad que desarrolle el trabajador, su experiencia, la jerarquía que ocupe y, sobre todo, la ubicación en la que se encuentre y el poder adquisitivo en ella. Está claro que no es lo mismo contratar a un colaborador en Puerto Rico o en Costa Rica. Las regulaciones de cada país en materia laboral en cuanto a teletrabajo no son las mismas, la calidad de vida tampoco.
Existen herramientas de medición, que permiten conocer cuáles los puestos más buscados en cada país y los sueldos y pagos máximos y mínimos ofrecidos según seniority. Como ejemplo, Salary Insights, una herramienta creada por Deel para brindar información actualizada sobre las tendencias salariales en todo el mundo. A partir del análisis de datos de 100.000 contratos realizados a través de su plataforma alrededor del mundo permite acceder a valores de referencia de salarios en distintos países y áreas de especialidad. Allí se puede observar que, en Panamá, por ejemplo, los ingenieros de software pueden ganar entre USD 14.700 y USD 85.200 – según seniority- siendo está la profesión más demandada en el país. De esa forma, quienes busquen contratar ese perfil pueden conocer cuál es la oferta no sólo más tentadora para los profesionales locales, sino también la que se ajuste a los montos mínimos ofrecidos localmente.
Los beneficios que brinda hoy la contratación internacional a directivos y colaboradores resultan en un valor diferencial para la empresa, pero es importante mantenerse alerta ante los nuevos desafíos que puedan surgir, y conocer la tecnología necesaria que permite acortar las distancias. Para que sea posible convocar al mejor talento, sin importar donde esté.
Fuente. Periódico Digital Centroamericano y del Caribe
