Los líderes empresariales de todo el mundo están abordando, actualmente, no sólo la volatilidad económica, la inestabilidad geopolítica y los efectos persistentes de la pandemia de COVID-19, sino también una variedad de cambios organizacionales que tienen implicaciones significativas para las estructuras, los procesos y las personas. Por lo que, para ayudar a los directores y sus equipos de liderazgo a considerar estas preguntas, McKinsey & Company lanzó el reporte “The State of Organizations 2023”, el cual busca identificar los cambios más importantes a los que se enfrentan las organizaciones y proporcionar algunas ideas y sugerencias sobre cómo abordarlos.
Como parte de la investigación, McKinsey realizó una encuesta a más de 2.500 líderes empresariales de todo el mundo, donde la mitad aseguró que sus organizaciones están preparadas para anticipar y reaccionar ante impactos externos, mientras que dos tercios consideran que sus organizaciones son demasiado complejas e ineficientes.
¿Cuál es el estado de las organizaciones en este 2023?
Principalmente, el artículo argumenta que las organizaciones que sean capaces de navegar exitosamente por estos cambios estarán en una mejor posición para prosperar en los próximos años.
Santiago Carbonell, socio y office manager para McKinsey Guatemala, comentó que: “a través de este estudio, las conversaciones con los directores ejecutivos y sus equipos, y los hallazgos de una investigación reciente de McKinsey, hemos identificado diez de los cambios organizacionales más importantes que las empresas deben abordar hoy”.
Carbonell, asegura que estos cambios son, a la vez, desafiantes y llenos de oportunidades, dependiendo de cómo las organizaciones aborden cada uno de ellos:
Aumentar la agilidad y fortalecer la resiliencia: Es importante que las organizaciones se preparen y suban a la ola de cambios que está sucediendo a nivel mundial, ya que aquellas que logren avanzar ágilmente puede que demuestren una ventaja significativa sobre sus competidores. Esto requiere una fuerza laboral rápida y resiliente que pueda pensar de manera creativa y proponer nuevas soluciones.
El auge de la fuerza laboral híbrida: Tras la pandemia las organizaciones tuvieron que acelerar el cambio hacia el trabajo remoto o híbrido. Según el estudio, alrededor del 90 por ciento de los empleados asegura que desea mantener ese estilo de vida, lo que ha generado que las empresas desarrollen estructuras claras basadas en estos modelos de trabajo para mantener un ambiente laboral productivo y sano.
Aceptar un futuro con inteligencia artificial (IA): En el 2022, las empresas duplicaron el uso de IA en sus procesos internos como cambios estructurales basados en datos y la creación de canales de talento más sostenibles a largo plazo. Por lo que, las organizaciones que puedan adoptar estas tecnologías estarán en una mejor posición para tener éxito en el futuro.
Lograr un progreso significativo en el tema de la diversidad, equidad e inclusión: Una fuerza laboral diversa e inclusiva es esencial para la innovación y la creatividad. El 70 por ciento de los encuestados aseguraron que sus empresas expresaron interés en estos temas, pero sólo el 47 por ciento considera que existe la infraestructura necesaria para generar un impacto con estas iniciativas. Por lo tanto, es importante que los líderes identifiquen oportunidades claras que generen cambios significativos dentro de la empresa.
Nuevas reglas de atracción y retención de talento: Los empleados están buscando cada vez más empresas que tengan propósito y generen un impacto positivo en el mundo, además de brindar un equilibrio laboral sano que vaya de la mano con sus actitudes y valores. Por lo que, las organizaciones que puedan adaptar las propuestas de valor de los empleados a las preferencias individuales del negocio ayudarán a cerrar la brecha entre lo que buscan los trabajadores y lo que necesitan las empresas.
Promover un liderazgo más consciente e inspirador: Según el estudio, únicamente el 25 por ciento de los encuestados considera que sus líderes están comprometidos e inspiran a sus empleados a dar lo mejor de sí mismos. Por lo cual, es importante que los ejecutivos puedan centrarse más en lo humano y en construir relaciones de confianza con sus empleados con el objetivo de poder liderar a escala, coordinando e inspirando redes de equipos. Para lograrlo, es importante desarrollar una conciencia tanto de ellos mismos como de los entornos operativos que los rodean.
Cerrando el abismo de la construcción de capacidades: Las empresas suelen anunciar elementos tecnológicos o digitales en sus estrategias sin tener las capacidades adecuadas para integrarlos. El estudio detectó que únicamente el 5 por ciento de los encuestados dicen que sus organizaciones tienen esas capacidades para llevarlas a cabo. Por lo tanto, es importante que desarrollen un conjunto de personas, procesos y tecnología que les permita hacerlo mejor que los competidores de manera consistente.
Caminando por la cuerda floja del talento: Durante mucho tiempo los líderes empresariales han tenido que equilibrar cuidadosamente los presupuestos y retener a las personas clave. En el clima económico incierto de hoy, necesitan enfocarse más en unir a los mejores talentos con los roles de mayor valor. La investigación de McKinsey muestra que, en muchas organizaciones, entre el 20 y el 30 por ciento de los roles críticos no están ocupados por las personas más adecuadas.
Salud mental: Aproximadamente nueve de cada diez organizaciones en todo el mundo ofrecen algún tipo de programa de bienestar, pero los puntajes globales de salud y bienestar siguen siendo bajos. Es recomendable que las organizaciones reenfoquen sus esfuerzos para abordar sistemáticamente las causas de los desafíos de salud mental y bienestar.
Eficiencia recargada: Más de un tercio de los líderes en la encuesta enumeraron la eficiencia como una de las tres principales prioridades organizacionales. Impulsar la eficiencia es algo más que gestionar crisis inmediatas o hacer el mismo trabajo con menos recursos; significa desplegar recursos de manera más efectiva donde más importan.
“Si bien no existe un plan para el éxito al abordar estos cambios organizacionales, algunas empresas sirven como inspiración para mostrar posibles caminos a seguir. Basados en el reporte “The State of Organizations 2023” compartimos las mejores prácticas de algunos líderes que se están adaptando a las recientes interrupciones económicas y operativas para forjar un nuevo camino para la organización moderna”, cerró Carbonell.
Fuente. McKinsey & Company