Durante el posparto, el cuerpo atraviesa un proceso de recuperación física y emocional que incluye cambios en el ciclo menstrual.
Ginecóloga especialista explica qué esperar y cómo cuidarse en esta etapa, mientras Saba acompaña a las mamás con su línea Maternidad.
El periodo posparto es una etapa de grandes cambios y adaptación para las mujeres, no solo a nivel emocional y físico, sino también en lo que respecta a la recuperación del ciclo menstrual. El regreso de la menstruación después del embarazo es un proceso que varía en cada mamá y que está íntimamente ligado a la lactancia, las hormonas y el estado de salud en general.
Ante esto, Saba —marca de Essity, compañía sueca y líder global en higiene y salud— reafirma su compromiso de acompañar a las personas menstruantes en cada etapa de su vida, ofreciendo información clara y apoyo sincero sobre la menstruación después del embarazo. Reconociendo que este es un momento único y lleno de cambios, la marca busca que cada mujer se sienta segura, informada y respaldada en su proceso.
“En Saba creemos que acompañar a las mujeres en cada etapa de su vida menstrual es un compromiso profundo y constante. La maternidad es una de las etapas más transformadoras y significativas, y queremos estar presentes no solo con productos que les brinden comodidad, seguridad y confianza, sino también con información que les ayude a conocer y entender su cuerpo”, expresó Estefanía Estrada, Gerente de Personal Care en Essity.
La Dra. María del Pilar Navas Aparicio, médico especialista en Ginecología y Obstetricia, explica que el puerperio —conocido como el “cuarto trimestre”— es una etapa clave para la recuperación física y emocional de la mujer. Este período, que dura alrededor de 40 días, se divide en tres fases: inmediato (primeras 24 horas), mediato (del segundo al séptimo día) y tardío (de la primera semana hasta el día 40).
“En estos días se presenta el sangrado llamado loquios, que no es menstruación, sino una mezcla de sangre, moco y pequeños restos de tejido uterino. Al principio es abundante y rojizo, pero con el paso de las semanas se vuelve más claro y escaso, hasta terminar con un flujo café-amarillento”, detalla la doctora.
Este sangrado es diferente a la hemorragia postparto, una complicación grave y principal causa de muerte materna en el mundo. Por eso, existen protocolos de prevención y manejo para reducir los riesgos.
En cuanto al regreso de la menstruación, la Dra. Navas explica que depende, en gran medida, de la lactancia. Cuando esta es exclusiva, la mujer suele entrar en amenorrea —ausencia de menstruación— debido a la elevación de prolactina (hormona que estimula la producción de leche) y la disminución de estrógenos. Esta “anticoncepción natural” puede tener una efectividad de más del 90% durante los primeros seis meses, siempre que se cumplan tres condiciones: lactancia exclusiva, ausencia de menstruación y un bebé menor de seis meses. Después de ese tiempo, la eficacia baja al 30-40%.
Las cifras muestran que, a nivel global, menos del 50% de las madres logran mantener lactancia exclusiva en los primeros seis meses. En Costa Rica, según UNICEF, la cifra es de 42.6%, un 25.3% menos que el promedio regional y 22.1% por debajo de la tasa mundial. Esto implica que muchas mujeres podrían ver el regreso de su ciclo menstrual antes de lo esperado, incluso si aún están amamantando parcialmente.
Consciente de estas necesidades, Saba acompaña a las mamás en cada momento con su línea Maternidad. Las nuevas toallas de maternidad post parto de Saba® ofrecen seguridad, comodidad y confianza para el intenso sangrado después del parto. Los protectores de lactancia Saba® ayudan a mantener la ropa libre de manchas gracias a su zona de absorción y adhesivo, brindando mayor seguridad y discreción
Para Saba la misión es educar, derribar tabúes y abrir conversaciones que por mucho tiempo han sido silenciadas, para que cada mujer viva esta etapa con la dignidad, el apoyo y el bienestar que merece.
Fuente. Essity