Los trastornos de la tiroides son más comunes de lo que se piensa, especialmente en mujeres. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente 750 millones de personas padecen de alguna patología tiroidea, de las cuales un 60% no están diagnosticadas2 debido a que sus síntomas son inespecíficos y suelen confundirse con otras condiciones de salud. Por ello, en el marco del Día Mundial de la Tiroides, que se conmemora el 25 de mayo, expertos endocrinólogos hacen un llamado sobre la importancia de las evaluaciones regulares para facilitar un tratamiento eficaz y mejorar significativamente la calidad de vida.
La tiroides, una glándula ubicada en la parte frontal del cuello, debajo de la laringe, con una forma que asemeja a una mariposa, puede ser la pieza faltante en el rompecabezas cuando ciertas funciones del organismo no trabajan correctamente. Y es que, la tiroides es responsable de producir, liberar y almacenar hormonas esenciales que influyen en el crecimiento y el metabolismo del cuerpo humano.
Sin embargo, muchas veces la tiroides no funciona como debería, y se ve afectada por trastornos como el cáncer de tiroides, tiroiditis o enfermedad de Hashimoto, así como el hipotiroidismo, caracterizado por síntomas como cansancio, aumento de peso inexplicable, piel seca, estreñimiento, cambios de humor, menstruaciones abundantes e intolerancia al frío, los cuales pueden confundirse, relacionarse o empeorar otras condiciones o padecimientos como depresión, menopausia y perimenopausia.
De hecho, estos trastornos, más comunes en mujeres, pueden tener un impacto significativo en su salud general y fertilidad, produciendo disfunción ovárica. Además, está condición puede asociarse con un incremento en el riesgo de abortos espontáneos y pérdida gestacional recurrente en el primer trimestre del embarazo.
“Si se ha intentado tener un bebé sin éxito, es natural que las mujeres empiecen a cuestionarse a sí mismas o a sus parejas. Es importante entender que el hipotiroidismo puede alterar el equilibrio hormonal esencial para la ovulación y la implantación del embrión, dificultando así la concepción. Incluso, también las mujeres que acaban de quedar embarazadas o que hayan perdido un embarazo previamente deben someterse a una evaluación clínica, especialmente si tienen factores de riesgo como antecedentes de disfunción tiroidea, diabetes tipo 1, antecedentes familiares o agrandamiento de la glándula tiroides”, explicó el Dr. Oscar Pinzón, especialista en endocrinología.
La buena noticia es que, una vez que los niveles tiroideos se normalizan con el tratamiento adecuado, las probabilidades de quedar embarazada pueden aumentar rápidamente. Por ello, es trascendental que las mujeres en esta situación se realicen pruebas de función tiroidea (TSH), ya que un diagnóstico y tratamiento oportuno pueden hacer una gran diferencia.
“Este sencillo análisis de sangre monitorea los niveles de hormonas tiroideas en busca de valores anormales permitiéndonos resolver el rompecabezas de estas afecciones no identificadas y romper el ciclo de la falta de detección que afecta la calidad de vida de millones de pacientes. Una vez diagnosticado, el hipotiroidismo se controla supliendo el déficit de hormona con una dosis precisa y constante de levotiroxina a largo plazo, mejorando significativamente la calidad de vida del paciente”, detalló el especialista.
Merck, compañía líder en ciencia y tecnología, se une a la iniciativa global para concientizar sobre la importancia de la salud tiroidea y su detección temprana. Bajo la campaña «La pieza que falta», busca destacar cómo los trastornos de la tiroides pueden pasar desapercibidos durante años e invita a la población de Centroamérica y el Caribe a realizar un test en línea de cinco minutos en la página web www.MideTuTiroides.com que les permitirá visualizar mejor los síntomas relacionados a la salud de su tiroides.
Esta evaluación puede ayudar a guiar a las personas hacia una conversación con un especialista cercano y la realización de pruebas adicionales, así como de ser necesario acceder a tiempo a un tratamiento eficaz.
Fuente. Merck