Guatemala. Con más de cuatro décadas de experiencia, Macizo se ha posicionado como una de las empresas más sólidas del sector de la construcción en Guatemala.
Fundada en 1979 tras el terremoto de 1976, nació con la misión de apoyar la reconstrucción nacional mediante la producción de blocks de concreto de alta calidad. Hoy, esa misión se ha transformado en una visión de liderazgo que ha trascendido generaciones.
A lo largo de los años, la empresa ha crecido estratégicamente, estableciendo ocho plantas de producción en distintas regiones del país.
La más reciente, ubicada en Chimaltenango, refleja su compromiso con el desarrollo regional y la generación de empleo local.
Esta expansión ha sido posible gracias a una sólida gestión empresarial y una alianza estratégica con Progreso, compañía reconocida por su liderazgo en soluciones de construcción e innovación sostenible en la región.

Alianzas estratégicas
La relación con Cementos Progreso ha sido clave en el fortalecimiento de Macizo. A través de esta alianza, han podido integrar procesos más eficientes, compartir mejores prácticas y reforzar su enfoque de calidad.
Esta sinergia ha permitido que Macizo eleve sus estándares y mantenga una oferta diversificada que incluye blocks, adoquines, celosías, tubos y losas prefabricadas, entre otros productos.
Luis Antonio Caná, gerente general de Macizo, expresó: «La colaboración con Progreso ha sido fundamental para nuestro crecimiento. Compartimos valores y una visión de desarrollo sostenible que nos ha permitido innovar y expandirnos, siempre enfocados en ofrecer productos de la más alta calidad a nuestros clientes.»
Macizo también destaca por su responsabilidad social y ambiental. Sus procesos productivos están alineados con principios de sostenibilidad, lo que garantiza no solo la calidad de sus materiales, sino también su respeto por el entorno y las comunidades donde opera.
Así, Macizo sigue construyendo un legado, ahora de la mano de Progreso, reafirmando su propósito: transformar el concreto en soluciones que mejoran la vida de los guatemaltecos.
Fuente. revistagranitodearena.com