Guatemala. La industria alimentaria atraviesa una transformación impulsada por nuevas prioridades del consumidor: valor nutricional, origen confiable y compromiso de las marcas con la sostenibilidad. Las personas ya no solo buscan alimentos nutritivos y accesibles, sino también productos alineados con sus valores.
En este contexto, Cargill refuerza su presencia en la región mediante Cargill Food Latinoamérica, una operación que responde a estas demandas con soluciones innovadoras, eficientes y alineadas con un sistema alimentario más responsable.
Una operación integrada para nuevos hábitos de consumo
La forma en que las personas se alimentan está cambiando rápidamente. Los consumidores incorporan proteínas y alimentos funcionales en distintos momentos del día y basan sus decisiones de compra no solo en sabor o precio, sino también en el impacto ambiental, el valor nutricional y la historia detrás del producto. Esta evolución exige una industria alimentaria ágil, cercana y con propósito.
Cargill responde a este cambio consolidando una operación regional que articula eficiencias, capacidades y experiencia en mercados donde ya cuenta con una base sólida, como Centroamérica y Colombia, y que se expande hacia nuevos focos de crecimiento en México, Brasil, Argentina y Ecuador. Esta estructura permite escalar soluciones, ampliar el portafolio y adaptarse con precisión a los desafíos regionales.
Una de las tendencias más marcadas es la creciente demanda de proteínas, que hoy son el ingrediente más buscado en los empaques de alimentos. Los consumidores buscan consumirlas en formatos versátiles, presentes en comidas principales, meriendas o snacks.
“Nuestro compromiso en Cargill es ofrecer a los clientes soluciones reales, que respondan a sus necesidades sin comprometer calidad, sostenibilidad ni accesibilidad. Por eso escuchar a nuestros consumidores es fundamental, porque sabemos que buscan alimentos en los que puedan confiar. Esto nos impulsa a seguir trabajando con responsabilidad y transparencia para fortalecer la confianza que depositan en nosotros y generar valor en cada elección”, afirmó Roberto González, Gerente General de Cargill Food Guatemala.

Diversificación con impacto y visión regional
La compañía integra sus operaciones en Latinoamérica con el objetivo de lograr mayores eficiencias y consolidar un portafolio regional más diverso. Este incluye categorías como aceites, harinas, cacao, edulcorantes, almidones y productos a base de tomate, desarrollados bajo estrictos estándares de seguridad alimentaria. Con ello, se busca atender la creciente demanda por ingredientes funcionales, trazables y de origen responsable.
“Esta integración regional es clave para responder con agilidad a las nuevas tendencias de consumo y avanzar hacia un sistema alimentario más sostenible, resiliente y accesible. Nos impulsa a operar de manera más coordinada entre mercados, compartir capacidades y atender de forma más efectiva las necesidades del sector”, recalcó González.
El entorno digital también ha cobrado un rol determinante. Las redes sociales educan, inspiran y aceleran prácticas alimentarias más conscientes. Desde la visibilidad de ingredientes funcionales hasta la exploración de nuevos sabores, el mundo digital está transformando la relación entre las personas y su alimentación.
En respuesta, Cargill continúa evolucionando para responder a las demandas del consumidor actual, fortaleciendo la confianza y reafirmando su compromiso con la sostenibilidad. Un ejemplo es el portafolio especial de Delicia, con productos listos para calentar como Nuggets, Chicken Fingers y tortas de pollo, elaborados con pechuga 100% cocida y empacados en formato resellable para conservar su frescura.
Cargill Food Latinoamérica se consolida como una plataforma estratégica para liderar la transformación alimentaria en la región. Su operación integrada permite ofrecer soluciones relevantes para un consumidor informado y exigente, al tiempo que refuerza su contribución a la seguridad alimentaria global, guiada por el propósito de nutrir al mundo de forma segura, responsable y sostenible.
Fuente. Cargill