Taylor Swift y Travis Kelce recibirán show de un millón de dólares en club de striptease por ganar el Super Bowl. La futura actuación estelar de Travis Kelce y la posible presencia de Taylor Swift en el próximo Super Bowl LVIII está atrayendo la atención tanto del mundo del deporte como del entretenimiento. Esta semana, el Hustler Club de Larry Flynt en Las Vegas ofreció una tentadora oferta valorada en un millón de dólares para la pareja del momento, con la condición de que el equipo de Kelce, los Kansas City Chiefs, ganen el evento deportivo. Como una posible celebración, el extravagante paquete del club de striptease, llamado “Topless Touchdown”, ofrece a la cantante de Cruel Summer y al jugador de la NFL una experiencia sin límites. Incluye acceso ilimitado a la lujosa Mohney Suite (valorada en 10.000 dólares por hora) y un desfile de botellas de champán Ace of Spades. Además, se les otorgaría 50.000 dólares para gastar a su antojo. Pero las sorpresas no terminan ahí: el transporte ida y vuelta en limusina, así como una membresía VIP Platinum de por vida en el Hustler Club que incluye bailes gratuitos indefinidamente, forman parte del paquete. Todo ello, a tan solo un paso del Allegiant Stadium donde se jugará el Super Bowl este 11 de febrero. En un intento por persuadir a la célebre pareja, la gerente general del club, Brittany Rose, ha expresado su confianza en proporcionarles una experiencia única y discreta: “Estamos acostumbrados a atender a una lista de celebridades y atletas, por lo que podemos garantizar que su discreción se cumplirá mientras la fiesta esté dentro de nuestro lugar.” Sin embargo, a pesar de la tentativa propuesta, surge la incertidumbre respecto a si Swift y Kelce aceptarán la invitación, especialmente teniendo en cuenta que el deportista fue visto luciendo la camiseta de otro club de striptease de Las Vegas tras una victoria contra los Raiders el pasado noviembre. Aunque la participación de la pareja en esta celebración extravagante es incierta, el Hustler Club no se queda atrás y se prepara para, posiblemente, recibir a la legión de seguidores de la cantante de 34 años, llamados ‘swifties’, garantizándoles una noche inolvidable en caso de celebrar la victoria de los Chiefs.