Las empresas latinoamericanas están adoptando cada vez más soluciones basadas en la nube, para satisfacer sus necesidades de infraestructura y desarrollo. El 80% de las empresas en la región ya adoptaron cloud, según NTT DATA. Este cambio hacia la nube ha traído consigo numerosas ventajas, como la escalabilidad, la flexibilidad y la reducción de costos. Sin embargo, también ha introducido nuevos desafíos, especialmente en términos de seguridad.
Los mecanismos de seguridad tradicionales se diseñaron para proteger los centros de datos y los terminales locales, no las aplicaciones y los servicios nativos de la nube. Con el paso a las tecnologías nativas de la nube, una gran automatización y el rápido lanzamiento de códigos, esas herramientas se quedan cortas. Semanalmente el 77% de las organizaciones lanzan un código nuevo en la nube y casi la mitad de estas, lo hacen diariamente, según el Estado de la Seguridad en la Nube.
GBM Cloud Defender es una plataforma de protección de aplicaciones nativas de la nube (CNAPP) en cualquier entorno, ya sea público, privado, híbrido o multicloud, y que las protege desde el código, que es la fase de inicio, hasta la nube. Además, pueden correlacionar información a través de una amplia gama de señales, en una sola vista, para identificar y priorizar los mayores riesgos de la organización.
En el nivel de desarrollo de códigos, GBM Cloud Defender los escanea en busca de vulnerabilidades que puedan haberse olvidado involuntariamente y señala errores en la configuración, abordando los riesgos comunes antes de que se puedan implementar. En el momento de ejecución, conecta información de diferentes aspectos de la seguridad en la nube para contextualizar y priorizar las alertas en función de su peligro potencial para la empresa.
“GBM Cloud Defender integra un amplio conjunto de capacidades de seguridad en un único servicio y plataforma para ofrecer seguridad unificada de primera clase, con flexibilidad de ajustarse a las necesidades de crecimiento de cada empresa. Esta solución protege a su organización en todas las operaciones, desde el desarrollo inicial del código hasta el aprovisionamiento y el tiempo de ejecución, ayudando a mitigar los riesgos contra posibles ciberataques”, comentó Alonso Ramírez, gerente Regional de Ciberseguridad de GBM.
La problemática en ciberseguridad se ha incrementado porque la velocidad de desarrollo de aplicaciones en la nube supera la rapidez con la que los equipos de seguridad de las organizaciones pueden protegerlas. Un estudio de IBM Security revela que el 82% de las filtraciones de información involucraron datos almacenados en la nube pública, privada o multicloud; siendo estos últimos los más difíciles de detectar y contener por las industrias.
Una de las principales ventajas de GBM Cloud Defender es su capacidad para identificar y mitigar riesgos de seguridad de manera proactiva y en tiempo real. Al estar impulsada por la inteligencia artificial, este servicio posibilita acelerar el tiempo de detección y automatización de respuesta a incidentes, con herramientas para identificar actividades anómalas, intrusiones y comportamientos maliciosos que pudieran no ser detectados por métodos tradicionales. Esto no solo reduce el riesgo de brechas de seguridad, sino que también minimiza el impacto de cualquier incidente que pueda ocurrir.
“La capacidad de anticiparse a los problemas y responder de manera efectiva es crucial para mantener la integridad y la confidencialidad de los datos. Con la adopción de GBM Cloud Defender no se trata solo de la velocidad de defensa o de navegar de manera inteligente por entornos de nube complejos con previsión. Es un servicio en el que acompañamos paso a paso a nuestros clientes, desde la asesoría personalizada hasta la implementación, con soporte continuo, de manera que cada empresa se sienta preparada para enfrentar el entorno digital”, concluyó Ramírez.
El servicio de GBM emerge como una solución esencial para las empresas que buscan salvaguardar sus activos digitales y mantener la integridad de sus operaciones. Al ofrecer una protección integral, mitigar riesgos de seguridad y optimizar el desarrollo, no solo resguarda contra amenazas actuales, sino que también prepara a las empresas para enfrentar y anticipar futuros desafíos. En la era de la nube, invertir en GBM Cloud Defender es invertir en el futuro de la seguridad empresarial.
Fuente. GBM