No importa qué edad tengas, la respuesta a esta pregunta siempre va a ser nunca será demasiado temprano para empezar a cuidar tu piel.
Nuestra piel está constantemente expuesta a agentes de deterioro como la contaminación del ambiente, smog, la luz del sol y los rayos UV que emiten las computadoras y televisiones. Es por eso que el correcto mantenimiento y protección de la piel debe ser un hábito inculcado en la niñez.
Ahora bien, dependiendo de tu edad tu piel va a pedir distintos activos para mantenerse luminosa y saludable.
A los 20 años, luchamos contra las pequeñas imperfecciones.
Puede que las alteraciones hormonales repentinas y las adolescentes erupciones de acné se hayan estabilizado, pero aún tienes que lidiar con los cambios hormonales provocados por estrés, nutrición inadecuada, falta de horas de sueño o, en el caso de las mujeres, el inicio del ciclo mensual.
Limpia. Lava tu rostro dos veces al día para eliminar la grasa, la suciedad y el maquillaje con un jabón apropiado para tu tipo de piel.
Tonifica. La tonificación es un excelente modo de prevenir las erupciones, pues proporciona a la piel un aspecto luminoso y sano, incrementando la renovación celular en la superficie cutánea.
Hidrata. Es momento de aplicar una crema o gel hidratante que contenga. No olvides hidratarte también por la noche aplicando una crema hidratante con ingredientes esenciales como aloe, el cual ayuda a mantener la piel flexible y radiante.
A los 30 años, queremos disimular el cansancio.
Las pieles comienzan a perder su aspecto luminoso y tersura. Ya no generamos colágeno de la manera en que lo hacíamos a los 20 años, por esto, la piel del rostro se vuelve menos elástica y más propensa a la aparición de arrugas, su textura se torna más áspera, seca y se dibujan las primeras líneas de expresión.
Todos queremos envejecer elegantemente, y para lograrlo, tu mejor aliado va a seguir siendo la nutrición de tu piel.
En esta etapa de tu vida se debe recurrir a cremas hidratantes regeneradoras con ingredientes activos naturales, como colágeno y ácido hialurónico.
A los 40 años, buscamos frenar el paso del tiempo.
La piel se vuelve cada vez más exigente, ya que la capacidad de retener la hidratación disminuye y el cuadro dermatológico refleja una importante pérdida de elasticidad.
Entre las sustancias activas más efectivas están la vitamina C, y el extracto de algas, que previenen la pérdida de elastina y aportan elasticidad y vitalidad a la piel.
Nunca es demasiado temprano ni tarde para tomar acción para cuidar tu piel. Acude a tu especialista de cuidado de la piel para brindarle atención según las necesidades específicas de tu piel.
Fuente. vidasana.sv