Las patas de gallo son uno de los signos de envejecimiento más comunes, son esas arruguitas muy finas, de sentido horizontal que se forman en la zona del contorno del ojo.
Es justo en esta zona, donde aparecen, porque el contorno de nuestros ojos es la primera zona de nuestro rostro, en perder elasticidad.
Para no tener que quejarnos de patas de gallo lo principal es retrasar su aparición, para ello es fundamental seguir los siguientes pasos:
Evitar la exposición al sol: el sol es la principal causa de las patas de gallo. Destruye el colágeno y reseca la piel, haciendo que pierda elasticidad y que aparezcan esas feas arruguitas. Además, una exposición excesiva al sol nos obliga a cerrar los ojos, formándose pliegues en el contorno.
No fumar: la exposición al humo también reseca la piel (además de ensuciarla) y favorece la aparición de las patas de gallo.
Hidratarnos con mimo el contorno de los ojos: Es importantísimo cuidar el contorno de ojos y mantenerlo hidratado. Nunca es pronto para empezar a cuidar nuestra piel.
Con estas tres claves y recurriendo a mascarillas, durmiendo las horas necesarias y tomando alimentos ricos en vitamina E, conseguiremos retrasar la aparición de las patas de gallo. Te recomendamos seguir nuestra dieta rejuvenecedora, en la que descubrirás aquellos alimentos que no pueden faltar en tu dieta diaria para luchar contra el envejecimiento.
Eso sí, aunque consigamos retrasar la aparición de esas antiestéticas arruguitas, tarde o temprano acabarán apareciendo, porque son un síntoma de la edad y, hasta la fecha, no podemos frenar el paso del tiempo. Así que, si ya han aparecido o lo están haciendo, vamos a practicar unos trucos naturales muy sencillos y eficaces para combatirlas y conseguir ralentizar su evolución. Toma nota.
Mascarilla de zanahoria: Es un truco de belleza que puede venir muy bien para las patas de gallo, ya que es muy humectante y nutritivo para la piel. Si la vamos a hacer nosotras mismas tendremos que mezclar un vasito de aceite de oliva, con zanahoria y papaya y batirlo. Nos lo aplicamos media hora y aclaramos.
Crema nocturna de uva: Consiste en hacer una mezcla de uvas y una cápsula de vitamina E, aplicárnosla y dejarla actuar toda la noche.
Mascarilla de miel: Se combina miel con una cucharadita de cebada y también con una yema de huevo. Es una gran combinación para recuperar la piel de la zona y combatir así las patas de gallo.
Cebolla: Pica muy menudas tres cebollas, caliéntalas suavemente y añade una cucharadita de miel y un vasito de agua de rosas. Es necesario moverlo bien y, todavía caliente, aplicarlo en las zonas con arruguitas. Deja reposar un par de horas.
¿Te has quedado con ganas de más? Aquí tienes más trucos contra las patas de gallo.
Recuerda que estos trucos harán disminuir las patas de gallo, pero no conseguirán hacerlas desaparecer del todo, especialmente, aquellas más antiguas. Si lo que queremos es eliminarlas para siempre, tendremos que recurrir a otro tipo de técnicas para la eliminación de las arrugas como el bótox o a la cirugía.
Fuente. Mujerdeelite.com