México. El Paseo de la Reforma se inundó del orgullo de la diversidad sexual de mexicanos de todo el país, dos años después de que covid-19 apagara las celebraciones y en medio de una quinta ola de contagios que ha encendido ciertas alarmas en el mundo pues, tras relajar las medidas sanitarias, el control de la pandemia y del contagio se complica, aunque los síntomas sean menores gracias a las vacunas.
De acuerdo con información oficial el gobierno capitalino calculó 250 mil asistentes, cifra similar a la registrada en 2018.
Sin embargo, algunos participantes calculaban que pudieron ser hasta medio millón de personas, pues desde las 10 de la mañana, hora de la reunión entre el Ángel de la Independencia y la Glorieta del Ahuehuete, hasta ya entrada la noche las personas no paraban de desfilar rumbo al Zócalo capitalino en la 44 edición de la Marcha del Orgullo LGBTQ+.
Olvidando la sana distancia, pie a pie los asistentes caminaban de un lado a otro buscando la fotografía con el outfit más audaz, o simplemente con quien les llamara la atención. No tenían miedo al contagio. Algunos de los presentes llevaban una cartulina con todas las letras del abecedario en la que tachaban una letra cada vez que besaban a una persona cuyo nombre tuviera esa inicial, así que los cubrebocas del arcoíris no duraron mucho puestos.
Lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, transgénero, travestis, intersexuales, queers, asexuales, pansexuales, agéneros y toda la gama de la diversidad de orientaciones y preferencias sexuales se mostraron orgullosos de reconocerse como una comunidad que cada vez crece más en un país que no termina de discriminar y cuestionar su elección de vida.
Participó por primera vez un grupo de diplomáticos de Alemania, Australia, el Banco Mundial, Canadá, Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Irlanda, Noruega, Nueva Zelanda, Quebec, Reino Unido y la Unión Europea. También marchó un contingente de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Más allá de las expresiones individuales en pos del respeto, la inclusión y la no discriminación, las consignas de la organización general de la marcha fueron dedicadas a las mujeres de la diversidad para que vivan en paz y libertad bajo el lema “¡Las calles son nuestras! Por una diversidad libre de odio, violencia y machismo”, así como el respeto al amor en todas sus formas y colores.
Fuente: Excelsior.